Berlín, 12 ene (.).- El Gobierno alemán reiteró este viernes su disposición a participar en una misión europea para salvaguardar el tráfico comercial en el mar Rojo ante los ataques de los rebeldes hutíes, una opción que se está debatiendo en Bruselas "de forma intensiva y con urgencia".
"Estamos dispuestos a participar", aseveró un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Sebastian Fischer, en una rueda de prensa ordinaria en Berlín.
A partir de la semana que viene, la cuestión será abordada por primera vez a nivel de los Veintisiete, indicó el portavoz, que matizó que antes de tomar una decisión es necesario examinar todos las implicaciones legales y constitucionales.
Un portavoz del Ministerio de Defensa, Mitko Müller, rehusó aportar detalles concretos sobre la forma que podría adoptar la participación alemana hasta que no se conozcan "las condiciones marco".
"Es preciso esperar a ver cómo es la decisión política, cómo es el posible mandato y cómo es el plan de operaciones, y entonces se puede determinar como sería una posible participación de la Bundeswehr", señaló.
De acuerdo con un documento del Servicio Europeo de Acción Exterior filtrado a diversos medios de comunicación, los planes que están siendo objeto de consultas en Bruselas pasan por desplegar al menos tres buques de guerra para proteger a los barcos mercantes de posibles ataques.
Ello ocurriría en el marco de una nueva misión, que tendría como escenario una zona comprendida entre el mar Rojo y el Golfo Arábigo y que podría comenzar a operar a finales del mes que viene.
En lugar de constituir una expansión de la misión antipiratería Atalanta -debido a las reticencias de España-, se contempla ahora la posibilidad de construirla sobre la existente misión de vigilancia Agenor, en la que participan actualmente nueve estados europeos (Alemania, Bélgica, Dinamarca, Francia -que la lidera-, Grecia, Italia, Noruega, Países Bajos y Portugal).
Estados Unidos y Reino Unido lanzaron esta noche varios ataques contra los rebeldes hutíes, que en los últimos meses han lanzado operaciones contra diversos cargueros con supuestos vínculos con Israel, como represalia por la guerra en Gaza, lo que ha llevado a casi una veintena de compañías navieras a redirigir sus buques para evitar el mar Rojo.
La gigafactoría de Tesla (NASDAQ:TSLA) en Alemania anunció hoy que deberá suspender parte de su producción durante dos semanas debido a dificultades con las cadenas de suministro ocasionadas por los retrasos en el transporte marítimo.
Un portavoz del Ministerio alemán de Economía señaló hoy que la situación presenta "desafíos" y que no se pueden descartar que de forma puntual algunas fábricas vean afectada su producción, aunque afirmó que por el momento no hay indicios de que pueda darse "un efecto negativo para el conjunto de la economía".