CUPERTINO - En respuesta a una resolución de la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos (USITC), Apple (NASDAQ:AAPL) ha anunciado que detendrá las ventas en Estados Unidos de los modelos Series 9 y Ultra 2 del Apple Watch que incorporan tecnología de sensor de oxígeno en sangre. Estos modelos, introducidos y enviados a partir de septiembre, han estado bajo escrutinio legal desde que un fallo de octubre de la USITC determinó que Apple violó los derechos de patente de Masimo Corp, marcando un desarrollo significativo en la disputa en curso entre el gigante tecnológico y la empresa de dispositivos médicos con sede en California.
Anticipándose a una posible prohibición de las importaciones, Apple ha tomado medidas para suspender las ventas de los modelos de reloj implicados. Se espera que las ventas en línea cesen hoy, mientras que estos modelos dejarán de venderse en las tiendas minoristas a partir del viernes. A pesar de ello, los consumidores aún pueden encontrar los Apple Watch a través de minoristas de terceros como Best Buy (NYSE:BBY) hasta el domingo, cuando la prohibición de importación podría entrar en vigor si no es vetada por el Presidente Biden.
La inminente prohibición está siendo examinada por el Gobierno de Biden, y se espera una decisión de la Representante de Comercio de EE.UU., Katherine Tai, para el 25 de diciembre. Este caso es paralelo al raro veto del Presidente Obama en una situación similar en 2013 que implicaba a Apple y Samsung (KS:005930). El resultado en este caso podría tener repercusiones significativas para las ventas de Apple Watch en el mercado estadounidense, ya que estos modelos constituyen una parte importante de su cartera de ventas.
Estos últimos acontecimientos se producen en un momento difícil para la división de wearables de Apple, que ha registrado una caída de sus ingresos hasta los 9.320 millones de dólares en el trimestre fiscal finalizado en septiembre, frente a los 9.650 millones del mismo periodo del año anterior. La situación también ha afectado al precio de las acciones de Apple, que cayeron a 195,89 dólares el lunes.
La disputa legal en curso pone de relieve la complejidad del derecho de patentes en la industria tecnológica, especialmente a medida que empresas como Apple amplían su oferta de productos con tecnologías relacionadas con la salud. El resultado de este litigio podría tener implicaciones significativas para el desarrollo futuro de productos y la aplicación de los derechos de propiedad intelectual en el sector.
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