Fráncfort (Alemania), 25 oct (.).- El Bundesbank prevé un aumento de la inflación en Alemania el último trimestre del año porque el año pasado el Gobierno alemán bajó el IVA para impulsar el consumo durante la pandemia y este año lo ha vuelto a subir.
En su boletín mensual de octubre, publicado este lunes, los economistas del banco central de Alemania pronostican que la inflación volverá a caer el próximo año.
Recuerdan que la inflación se situó en Alemania en el 3,4 % en agosto y subió al 4,1 % en septiembre.
"En general la tasa de inflación podría subir más antes de retroceder el próximo año", según los economistas del Bundesbank.
El motivo, entre otros, es un efecto base porque el año pasado el Gobierno alemán bajó de forma temporal el IVA en la segunda mitad del 2020 para impulsar el consumo y el crecimiento económico.
Como la tasa de inflación da el cambio del índice de precios de consumo respecto al año anterior, es ahora más elevada porque compara con los precios del año pasado, que fueron más bajos por la reducción del IVA.
Además se ha reducido un efecto estadístico extraordinario, que había frenado la subida de los precios.
Se trata de un fuerte ajuste de algunos componentes de la cesta de la compra del índice armonizado de precios de consumo (IAPC) debido a la pandemia.
Estos componentes se han ajustado para el 2021 a los hábitos de consumo del año anterior.
Por ejemplo, los viajes organizados tuvieron menos peso en el IAPC en 2020, por lo que su ponderación se redujo con el cambio de año y frenó también algo la inflación en octubre, pero en noviembre va a tener un efecto al alza.
Los precios de algunos productos y servicios han subido más que otros.
Por ejemplo, los precios de los alimentos apenas han cambiado en septiembre, según los economistas del Bundesbank.
Los servicios solo han sido un poco más caros por la fuerte caída de los precios de los servicios de transporte.
Pero los productos industriales, sin tener en cuenta ropa y calzado, se han encarecido mucho por el aumento de los precios de la energía, tras la subida del precio del petróleo, que aumentó en septiembre un 6 % respecto al mes anterior.
Los economistas del Bundesbank prevén que "el fuerte aumento de los precios del mercado al contado del gas natural se reflejará en los precios de consumo el próximo año".