Sao Paulo, 5 abr (EFE).- El Sindicato de Metalúrgicos del ABC, en
el que el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva inició su
carrera como líder sindical y político, le pidió hoy que opte por
los aviones suecos Gripen en la licitación abierta para adquirir 36
cazabombarderos.
El apoyo formal a los aviones suecos fue expresado por los
dirigentes de esa asociación de trabajadores en un documento
divulgado hoy en la ciudad de Sao Bernardo do Campo, la cuna
política de Lula y en donde el gobernante tiene su residencia.
Los tres finalistas en la licitación abierta por la Fuerza Aérea
Brasileña para la compra de los aviones militares son los Gripen NG
de la fabricante sueca Saab; los F-18 Súper Hornet de la
estadounidense Boeing y los Rafale de la francesa Dassault.
El Gobierno prevé anunciar el vencedor en las próximas semanas.
Pese a que las autoridades brasileñas aún analizan las ofertas de
los fabricantes, Lula ya manifestó su preferencia por los Rafale en
un encuentro que tuvo en septiembre pasado con su homólogo francés,
Nicolas Sarkozy.
Ambos anunciaron entonces la intención de convertir a Brasil y
Francia en "socios estratégicos en el dominio aeronáutico" y Lula
dijo que su Gobierno "abriría negociaciones" con Dassault para la
compra de los Rafale.
Pese a esa preferencia de Lula, el Sindicato de Metalúrgicos del
ABC manifestó en un comunicado que "el proyecto Gripen conquistó el
apoyo del movimiento sindical y de la alcaldía de Sao Bernardo do
Campo luego de que la Saab, empresa sueca que fabrica los cazas,
anunciara que el posible contrato prevé inversiones y transferencia
de tecnología a Brasil".
Para los sindicalistas, la opción por el avión sueco va a generar
inversiones y empleos directos en Sao Bernardo do Campo, municipio
del cinturón industrial de Sao Paulo.
El documento de los sindicalistas fue divulgado durante una rueda
de prensa que el presidente del Sindicato de Metalúrgicos, Sergio
Nobre, ofreció junto con el alcalde de Sao Bernardo, Luiz Marinho,
un correligionario y amigo cercano de Lula, que también presidió el
sindicato.
En el acto también participó el líder sindical sueco Stefan
Lofven, presidente de la IF Metall, que es el mayor sindicato de los
metalúrgicos en la industria automotriz de Suecia.
"El foco principal de la lucha sindical es el empleo. Si el
Gobierno opta por el modelo sueco, habrá transferencia de tecnología
y generación de empleos en el sector metalúrgico en el ABC (cinturón
industrial de Sao Paulo)", afirmó Nobre.
"Se trata de una oportunidad única para la real transferencia de
tecnología a Brasil y de amplia generación de empleos", agregó
Marinho, que el mes pasado viajó a Suecia para reunirse con los
dirigentes de la Saab. EFE