Por Steve Holland y Matt Spetalnick
SEÚL (Reuters) - El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lanzó el miércoles una dura advertencia al líder norcoreano, Kim Jong Un, cuando dijo que las armas nucleares que está desarrollando "no están aumentando su seguridad, están poniendo a su régimen en grave peligro".
"No nos subestimen y no nos pongan a prueba", dijo Trump a Corea del Norte al concluir una visita a Corea del Sur con un discurso ante la Asamblea Nacional en Seúl.
Trump pronunció algunas de sus líneas más duras contra Corea del Norte, en un discurso que abordó distintos temas y que estuvo cargado de acusaciones específicas de abusos a los derechos humanos en Pyongyang. El republicano llamó a los países del mundo a aislar al estado comunista al negarle "cualquier forma de apoyo, suministros o aceptación".
El presidente estadounidense describió una imagen distópica de Corea del Norte, afirmando que la gente sufre en "gulags" y algunos sobornan a funcionarios gubernamentales para trabajar como "esclavos" en el extranjero, en lugar de vivir en el país. No entregó evidencias que respaldaran esas acusaciones.
Trump volvió a su dura retórica contra Corea del Norte, un día después de que pareciese haber moderado una posición que había generado temores de un conflicto militar en todo el este de Asia. El martes, el republicano incluso ofreció una apertura diplomática para "lograr un acuerdo".
En su discurso del miércoles pasó mayormente a la ofensiva, pero prometió un "camino a un futuro mucho mejor" para Corea del Norte si detiene el desarrollo de misiles balísticos y accede a "una desnuclearización completa, total y verificable", algo que Pyongyang ha prometido que nunca hará.
"Nosotros no permitiremos que las ciudades estadounidenses sean amenazadas con su destrucción. Nosotros no seremos intimidados", dijo a los legisladores surcoreanos. "Nosotros no permitiremos que las atrocidades de la historia se repitan aquí, en esta tierra en la que luchamos y morimos por proteger", añadió.
"El mundo no puede tolerar la amenaza de un régimen rastrero que amenaza con la devastación nuclear", afirmó, en momentos en que tres grupos de portaaviones estadounidenses navegan hacia el oeste del Océano Pacífico para realizar ejercicios militar, una inusual muestra del poderío naval estadounidense en la región.
Dirigiendo sus palabras directamente a Kim, Trump insistió: "Las armas que está adquiriendo no están aumentando su seguridad, están poniendo a su régimen en grave peligro. Cada paso que da por este camino oscuro eleva los peligros que enfrenta".
El discurso ocurrió después de que Trump debió abortar el miércoles una visita no anunciada a la frontera que separa a Corea del Sur y del Norte, debido a que una espesa neblina impidió que su helicóptero pudiera aterrizar.
Trump intentó ir a la Zona Desmilitarizada en el último día en una visita de 24 horas a Seúl. El republicano viajará luego a China, donde funcionarios estadounidenses dicen que instará a un reacio presidente Xi Jinping para que presione con fuerza a Pyongyang.