Atenas, 19 dic (.).- El Parlamento griego aprobó hoy los Presupuestos Generales de 2018, que por segundo año consecutivo prevén un crecimiento económico tras ocho de recesión, pero incluyen también nuevas medidas de ahorro e incrementos de impuestos.
La ley salió adelante con los votos de la coalición gubernamental del izquierdista Syriza y los nacionalistas Griegos Independientes y contó con el rechazo de toda la oposición.
En su discurso de clausura tras cinco días de debate, el primer ministro, Alexis Tsipras, afirmó que el erario aprobado hoy es el último bajo un programa de rescate, y aseguró que el país está recuperando su independencia económica y la confianza internacional.
Además, defendió las reformas emprendidas por su Gobierno, medidas que, dijo, "nadie había hecho antes", y que han servido para atraer inversores y crear empleos.
Los presupuestos de 2018 contemplan un incremento de ingresos de 1.794 millones de euros respecto a este año, hasta un total de 50.509 millones, y un recorte del gasto de 2.077 millones, hasta los 48.438 millones de euros.
El superávit primario (que excluye el pago de los intereses de la deuda) volverá a superar con creces los niveles exigidos en el programa de medidas asociadas al tercer rescate y, en lugar del 3,5 % previsto, ascenderá al 3,82 % del producto interior bruto (PIB).
La deuda de Estado se situará en 179,8 % del PIB hasta los 332.000 millones de euros.
En total, están previstos aumentos de ingresos y recorte de gastos por un total de 1.900 millones de euros, de los cuales 951 vendrán de nuevos impuestos y de aumentos de los ya existentes.
Entre los nuevos impuestos figuran dos que afectan el turismo, la locomotora de la economía griega en los últimos cinco años.
Se trata de una tasa de pernoctación para los hoteles y la imposición de los ingresos por el alquiler de viviendas a través de plataformas electrónicas como airbnb, medidas de las cuales se esperan ingresos de 122 millones de euros.
Además, se elimina el mínimo exento de impuestos en los ingresos de parlamentarios y jueces (el 25 % de sus salarios), lo que aportará a las arcas tan solo 44 millones de euros pero sí tiene un alto valor simbólico.
Entre las medidas de ahorro, figuran 328 millones de euros por la congelación de las pensiones; 121 millones por la eliminación de la posibilidad de deducir los gastos médicos en la declaración de la renta, y 58 millones por la reducción a la mitad de las ayudas a la calefacción para los contribuyentes con ingresos más bajos.
Los presupuestos se han confeccionado sobre una base de cálculo que parte de un crecimiento del PIB del 2,5 %, tras un previsible 1,6 % en este ejercicio.
El Gobierno prevé un incremento de las inversiones en un 11,4 %; del consumo privado en un 1,2 %, de las exportaciones en un 4,6 %, y de las importaciones en un 3,8 %.
Además, cuenta con una reducción del desempleo desde el 21,7 % en este año al 18,4 %.