Torrelavega (Cantabria), 4 feb (.).- La dirección de la empresa Aspla Plásticos Españoles ha lamentado la deriva del conflicto laboral por la falta de avances en la negociación del convenio, una huelga por parte de su plantilla que ya dura siete días, y ha culpado al comité de "paralizar" de forma unilateral las negociaciones.
En un comunicado, la empresa ha reiterado este sábado su "postura conciliadora y de entendimiento" con el fin de llegar a un acuerdo favorable para toda la compañía, frente a la huelga indefinida que tiene "un importante impacto" para el desarrollo del negocio y "los efectos impredecibles" que puede tener para el futuro de la empresa.
Por ello, ha hecho un llamamiento "al respeto y seguridad" para aquellos trabajadores que no deseen secundar la huelga, y ha explicado que el objetivo de la dirección es hacer propuestas de mejora de las condiciones laborales y económicas "sin poner en peligro la sostenibilidad del negocio y del empleo".
Además, la dirección ha advertido de que el resultado de esta negociación del convenio que expiró en febrero de 2022 "será clave a la hora de garantizar la sostenibilidad del negocio y mantener la competitividad necesaria en el futuro", y ha defendido su última propuesta al considerar que permite garantizar la viabilidad de la empresa.
En especial, ha destacado que su propuesta está acorde con las previsiones de futuro y con los cambios regulatorios e impositivos introducidos a comienzos de este año, siendo España el único país de la Unión Europea en el que se ha creado un impuesto adicional al plástico que afecta a Aspla "de manera directa".
PARO AL 100 %
En un comunicado, el comité ha destacado este sábado que, en el séptimo día de huelga, la fábrica "sigue parada al 100 %" y se prevé un fin de semana tranquilo, a la espera de la manifestación programada para el lunes en Torrelavega, a partir de las 17:00, que partirá de la plaza Baldomero Iglesias y concluirá en la fábrica.
Ademas, ha destacado que, a pesar de las bajas temperaturas que se registran en la zona, la plantilla sigue acudiendo a las portillas de acceso tanto a la fábrica de Torrelavega como al almacén de Reocín, en el que participan incluso trabajadores de los turnos de noche.
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