Shenzhen (China), 25 abr (EFE).- La multinacional de tecnologías y telecomunicaciones china Huawei destinará en 2012 a actividades de investigación y desarrollo 4.500 millones de dólares, el 19,7 % más que en 2011, informó hoy el vicepresidente ejecutivo de la compañía, Eric Xu.
"Tenemos que expandir nuestra inversión en investigación y desarrollo y mejorar nuestras innovaciones", dijo Xu durante una conferencia para analistas de la empresa.
Desde el punto de vista geográfico, el directivo explicó que, en general, los esfuerzos inversores de la compañía se concentrarán en Europa, Japón y Corea.
Xu desmintió que Huawei estuviera interesada en comprar la división de móviles de Motorola, que acabó adquiriendo Google. "Incluso si hubiéramos tenido esa idea -precisó-, el Gobierno de EEUU nunca lo habría aprobado".
Sobre las posibles implicaciones que pudiera tener esta decisión en el desarrollo del sistema operativo Android del gigante estadounidense, dijo que desde Google les han expresado que el ecosistema de software seguirá siendo abierto y continuará con su desarrollo habitual.
No obstante, Xu explicó que la estrategia de Huawei es "tener una sola plataforma de hardware que soporte múltiples tipos de software".
Sobre su división de dispositivos para el gran consumo, Xu indicó que su intención es que el crecimiento del área de teléfonos inteligentes ("smartphones") no se apoye en pérdidas.
Sin embargo, matizó que incluso aunque Huawei no pudiera hacer dinero del negocio de terminales, su división de chips para móviles arrojaría resultados económicos positivos.
La compañía detalló su información financiera sobre el ejercicio de 2011, que cerró con unos ingresos de 203.900 millones de yuanes (32.323 millones de dólares), así como sus previsiones de cara al futuro.
El 32 % de la facturación provino de China, mientras que Europa, Oriente Próximo y África aportaron el 36 %. América supuso el 15 % y la región de Asia y el Pacífico -excluida China- ingresó el 17 % del total del grupo.
En 2011, Huawei contrató a 30.000 personas en todo el mundo. EFE