MADRID (Reuters) - Bankia (MC:BKIA) se adelanta casi un año a sus objetivos de recortar su cartera de activos tóxicos y negocia los últimos detalles para vender a Lone Star inmuebles adjudicados y créditos de dudoso cobro con un valor conjunto de unos 3.000 millones de euros, dijo una fuente conocedora de las negociaciones.
Tras una información al respecto publicada por El Confidencial, la entidad se limitó a confirmar el viernes negociaciones al respecto en un comunicado al regulador bursátil.
Uno de los principales objetivos del banco, todavía controlado por el Estado tras su rescate en 2012, es aplicar una profunda limpieza de su balance para liberar liquidez y recursos con el objetivo de reducir sus activos problemáticos en 8.800 millones de euros hasta 2020, una media de unos 3.000 millones de euros al año.
La entidad ya había traspasado alrededor de 2.500 millones de euros este año en activos y créditos dudosos, por lo que con esta operación prácticamente duplica el objetivo anual.
"El mercado está muy receptivo en estos momentos a este tipo de productos, no se trata de un interés particular por acelerar el plan, pero las condiciones de mercado son muy favorables", explicó una fuente que participa en la operación.
Mientras los bancos llevan años desprendiéndose de activos inmobiliarios todavía heredados de la debacle del sector entre 2008 y 2013, las condiciones de mercado y la subida de los precios han disparado el apetito del inversor institucional por este tipo de productos.
(Información de Carlos Ruano; Editado por Tomás Cobos)