Berlín, 31 ago (.).- El Gobierno alemán alertó este miércoles de la transformación a marchas forzadas de la industria del país, obligada por el recorte del suministro de gas de origen ruso a precios bajos sobre el que se asentó un modelo económico que tiene pocas perspectivas de volver a darse.
"El tiempo del gas a precios muy baratos, es decir, un modelo de negocio, un modelo económico que se basó en obtener de Rusia el gas más barato que de otras regiones, no regresará rápidamente o ni siquiera volverá", admitió el ministro de Economía y vicecanciller, el Verde Robert Habeck.
El ministro, también responsable de la cartera de Protección del Clima y que en el tripartito de coalición que preside el canciller Olaf Scholz busca vías alternativas al gas ruso tras el recorte de su suministro, advirtió que las transformaciones hechas por la industria alemana desde que comenzó la guerra en Ucrania significan un "cambio de estructura".
Habeck explicó tras una reunión del Consejo de Ministros alemán celebrado con carácter extraordinario hasta hoy y en el que este lunes participó como invitado el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, que ese cambio de estructura puede tener consecuencias beneficiosas.
Pero advirtió de que si se produce "con una gran presión", puede causar lo que denominó "una quiebra de estructura".
Habeck coincidió en que la situación a la que se está enfrentando la industria alemana es "preocupante" al día siguiente de que el presidente de la Confederación de la Industria Alemana (BDI), Siegfried Russwurm, declarara "amenazado" el fundamento de la industrial del país.
"El consumo de gas de la industria se situó en julio un 21 % por debajo del consumo de hace un año, pero atención ante sacar consecuencias falsas: detrás no están las mejoras de la eficiencia, sino una caída dramática de la producción", añadió Russwurm, quien remató: "eso no es un éxito, sino la manifestación de un problema masivo".
Hoy el ministro Habeck admitió que "la parte del león" de los ahorros en el consumo de energía la ha hecho la industria en los últimos meses.
"Eso ha ayudado a que los almacenes (de gas) hayan podido llenarse como están ahora, hoy en torno a un 83 % y eso fue conseguido por la industria. Una parte mediante 'fuel switch', es decir, el aprovechamiento de otras posibilidades, en parte recursos de petróleo que no se utilizaban, líneas de suministro de carbón, en parte también porque se han hecho inversiones en energías alternativas y en medidas de incremento de la eficiencia", constató el ministro.
"En parte también porque se recortó la producción, es decir sin funcionar al cien por ciento sino a porcentajes menores de capacidades pero en gran medida porque se detuvo la producción", reconoció Habeck.
El ministro Verde explicó que durante los próximos meses serán los hogares alemanes los llamados a contribuir con su parte en el ahorro energético y explicó que hasta ahora las posibilidades que tuvieron para hacerlo "han sido reducidas" y que en los meses fríos del año tendrán su participación en el esfuerzo colectivo.