Fráncfort (Alemania), 10 ene (.).- El grupo automovilístico alemán BMW (ETR:BMWG) vendió el año pasado 2.399.636 vehículos de las marcas BMW, Mini y Rolls-Royce (LON:RR), un 4,8 % más que en 2021, en un entorno difícil, aunque duplica las ventas de eléctricos.
BMW ha informado este martes de que en 2022 las ventas estuvieron perjudicadas por los cuellos de botella en algunos suministros, los confinamientos en China por la pandemia y la guerra en Ucrania.
Las entregas cayeron en el primer semestre, pero subieron paulatinamente en la segunda mitad del año.
La marca BMW entregó 2.100.692 automóviles en 2022, un 5,1 % menos que el año anterior, si bien mantiene la primer posición mundial de ventas en el segmento de la gama alta.
Sus entregas subieron en el cuarto trimestre un 11 %, hasta 566.826 automóviles.
Las ventas de la marca Mini cayeron el pasado ejercicio hasta 292.923 unidades (-3 %), aunque también subieron en el cuarto trimestre (+8,2 %).
Rolls-Royce vendió el año pasado el récord de 6.021 unidades (+7,8 % que en 2021), tras el lanzamiento en octubre del eléctrico de lujo Spectre y por la demanda de los modelos Cullinan y Ghost.
La marca Rolls-Royce se prepara hasta finales de 2030 para producir sólo eléctricos.
El director de Ventas del grupo, Pieter Nota, dijo que su "fuerte cartera de producto es la mejor respuesta a un entorno desafiante" y destacó la elevada demanda de sus modelos eléctricos.
BMW vendió el año pasado 215.755 eléctricos en todo el mundo (+107,7 % que en 2021).
Las ventas de BMW y Mini cayeron el año pasado en Europa hasta 877.369 unidades (-7,5 %), en China hasta 791.985 unidades (-6,4 %) y en EEUU hasta 361.892 unidades (-1,3 %).
Nota se mostró optimista respecto al 2023 y apuesta por la movilidad eléctrica con el objetivo de lograr una cuota de eléctricos en las ventas del 15 % en 2023.
El lanzamiento del BMW i5 este año contribuirá a lograr este objetivo y a la electrificación de toda la oferta de modelos.