Buenos Aires, 4 abr (EFE).- Unos 1,9 millones de turistas se trasladaron hacia diversos destinos de Argentina por los festivos de la Semana Santa, informó este domingo la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
Después de un año de pandemia y tras una Semana Santa sin turismo en 2020, debido a la cuarentena obligatoria que había establecido el Gobierno, este año los turistas se vieron alentados a recorrer más de cien ciudades de la Argentina, según CAME.
Con una estancia media de tres días, CAME calculó que el fin de semana largo dejó ingresos directos de 11.400 millones de pesos (92 millones de dólares) en las economías regionales y la ciudad de Buenos Aires.
A los turistas se agregaron 2,3 millones de excursionistas que se trasladaron a ciudades cercanas en busca de ocio, deportes o encuentros familiares y que CAME estimó que gastaron unos 2.666 millones de pesos (29 millones de dólares).
Entre turistas y excursionistas, unos 4,2 millones de argentinos recorrieron el país entre el jueves pasado y este domingo generando un impacto económico directo de 14.066 millones de pesos (152 millones de dólares), resumió.
La movilización de personas estuvo cerca de recuperar los valores prepandemia, según CAME, ya que en Semana Santa de 2019 se registraron 2,1 millones de turistas y 2,6 millones de excursionistas.
Excepto la situación sanitaria y económica, los factores que jugaron a favor del turismo en la Semana Santa de este año fueron el buen tiempo, que la fecha cayó sobre principio de mes cuando las personas cobran sus haberes y que los empresarios del sector se mantuvieron prudentes y flexibles en los precios, indicó CAME.
Y agregó también “el temor a que se vuelvan a cerrar las ciudades frente a la segunda ola de covid y no se pueda viajar luego varios meses”.
Argentina atraviesa una aceleración de los casos en la última semana que acerca la segunda ola de contagios y que preocupa al Gobierno, que ya ha indicado que evalúa medidas para disminuir la circulación de personas.
"A diferencia de otras épocas, el argentino se quedó a vacacionar en su país y hubo muy poco turismo internacional por el cierre de fronteras", explicó CAME.
Argentina ha cerrado por completo sus fronteras terrestres y ha restringido vuelos internacionales para frenar la llegada de las variantes de la covid-19 y enfrentar la nueva escalada de contagios, cuando acumula 2.383.537 casos de coronavirus desde el inicio de la pandemia y 56.106 decesos.