Tokio, 29 jul (EFE).- La Bolsa de Tokio cosechó hoy un cierre mixto en un ambiente enrarecido por los resultados, peores de lo esperado, publicados por valores de peso en el parqué tokiota, pese a los avances cosechados en la víspera por las principales plazas mundiales.
El selectivo Nikkei cerró hoy con una bajada de 25,98 puntos, un 0,13 por ciento, y se situó en 20.302,91 unidades.
En cambio, el segundo indicador, el Topix, que agrupa a los valores de la primera sección, ganó 4,48 puntos, un 0,27 por ciento, hasta las 1.633,94 unidades.
El parqué tokiota abrió ligeramente al alza animada por las ganancias cosechadas en las principales plazas europeas y en Wall Street en la víspera, así como la ligera recuperación de los precios de las materias primas tras las fuertes caídas provocadas por la volatilidad de los mercados chinos.
Al poco tiempo del inicio de la sesión, tanto el Nikkei como el Topix cayeron afectados por el golpe que asestó en los inversores el que importantes empresas niponas como el fabricante de robots industriales Fanuc (TOKYO:6954) -que cedió un 10,7 por ciento- decidieran reducir sus previsiones de beneficio neto para el año fiscal actual.
El Topix logró, no obstante, remontar durante la tarde.
El sector de maquinaria eléctrica lideró las pérdidas, seguido por el de las navieras, al tiempo que los de información y comunicación e instrumentos de precisión cosecharon los mayores avances.
La mayor operadora de telefonía de Japón, Nippon Telegraph and Telephone (TOKYO:9432) (NTT), subió un 2,7 por ciento, y su subsidiaria NTT Data (TOKYO:9613) avanzó un 3,5 por ciento.
El valor de las acciones del fabricante de electrónica Casio Computer (TOKYO:6952) se incrementó un 1,6 por ciento en medio de las especulaciones que apuntan a que la firma impulsará la producción de "smartwatches" (relojes inteligentes).
En la primera sección, 920 valores avanzaron, frente a los 847 que retrocedieron, mientras que 116 cerraron en tablas.
El volumen de negocio ascendió a 2,459 billones de yenes (18.010 millones de euros), por debajo de los 2,577 billones de yenes (18.875 millones de euros) de la víspera.