Madrid, 25 mar (.).- El presidente de la CNMV, Rodrigo Buenaventura, ha recordado a los "influencers" y lideres de opinión presentes en las redes sociales que están sujetos a las reglas de abuso de mercado, ya que el régimen de recomendaciones de inversión es aplicable a cualquier persona que se presente como experto.
Un régimen que puede que muchos de ellos no lo conozcan todavía, ha dicho Buenaventura, que ve necesario que los supervisores hagan "un esfuerzo especial" para incrementar el conocimiento de la normativa por parte de los inversores minoristas, con el objetivo de que se familiaricen con el tipo de operaciones e inversiones que están permitidas y las que no.
Y probablemente, ha añadido, los supervisores tengan que incrementar este conocimiento mediante herramientas distintas a las tradicionales, para llegar a la comunidad de inversores conectados.
Al respecto, ha explicado que las redes sociales son un elemento cotidiano a través del cual los inversores se conectan y los supervisores no pueden ni deben obviar este hecho.
"Contribuyen a una comunidad mejor informada, siempre que la información compartida a través de ellos no sea falsa ni privilegiada. Las redes sociales también son cada vez más utilizadas por emisores e incluso reguladores, por lo que no se les debe culpar por las prácticas abusivas que puedan ser acordadas a través de ellas", ha añadido.
Además, sin órdenes y ejecuciones reales, ninguna conducta, a menos de que se trate de información falsa o engañosa, supone manipulación del mercado. Es sólo con la negociación real cuando aparece el posible comportamiento manipulador, ha explicado.
"En otras palabras: la regulación de abuso de mercado no contempla la "infracción de pensamiento", ha insistido el presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) durante su participación en una jornada del I Observatorio de las Finanzas organizado por El Español.
En su intervención, también hecho referencia a la Unión del Mercado de Capitales, que en su opinión, se configura como un "elemento esencial" para la mejora de las opciones de inversión y también para una financiación más diversificada de las empresas.
"La idea es aumentar el peso de los mercados de valores en la financiación de las empresas mediante acciones y en contra de la financiación bancaria, vía préstamos", con el objetivo de que ello reporte varios beneficios como una mayor resiliencia ante futuras crisis, mayores posibilidades de crecimiento -hay un problema de tamaño medio, especialmente en España-, y mayores oportunidades para canalizar los ahorros de los inversores.
En este sentido, el presidente de la CNMV ha explicado que la pandemia de la covid ha demostrado la importancia que tiene que las empresas cuenten con suficiente capital para hacer frente a momentos de incertidumbre y, para los inversores, contar con carteras diversificadas.
No obstante, ha dicho que es conveniente hacer una reflexión sobre cómo se puede facilitar la incorporación al mercado de más empresas, fundamentalmente de pymes, junto con una mayor participación de los inversores minoristas, una combinación que no obstante, debe hacerse "con cuidado", especialmente, si al mismo tiempo, se promueve una reducción de los requisitos de entrada en el mercado de nuevos emisores.
La combinación de más pymes cotizadas, más inversores minoristas y menores requisitos de información puede ser "una receta peligrosa", ha advertido Buenaventura, que ha considerado que la "única forma inteligente de promover" todo esto es que éstos accedan al nuevo mercado mediante esquemas de inversión colectiva, administrados por gestores profesionales.
Unos vehículos que incluso podría incentivarse desde la regulación europea frente la inversión directa en pymes individuales, según ha planteado.
"Necesitamos atraer más empresas al mundo cotizado", y para ello, es apropiado reducir los costes y el tiempo necesario para acceder al mercado, pero al hacerlo, hay que ser cuidadosos y no reducir la protección al inversor", ha concluido.