Bruselas, 16 mar (.).- El presidente del Comité de las Regiones (CdR), Vasco Cordeiro, avisó este jueves que la Unión Europea (UE) "no funcionará de la misma manera" si se reduce el peso económico de la política de cohesión, concebida por Bruselas para paliar las desigualdades territoriales.
"Si rompemos la política de cohesión, quizás tendremos una Unión Europea, pero no va a funcionar de la misma manera", apuntó Cordeiro durante un evento de la nueva Alianza para la Cohesión, una plataforma de autoridades y asociaciones locales y regionales de la UE que abogan por la protección de esta política.
Los fondos de cohesión representan a casi un tercio del presupuesto total de la UE y, en el actual período de programación 2021-2027, comprenden una cantidad de 392.000 millones de euros.
Aunque, en principio, están pensados para financiar proyectos de desarrollo a largo plazo, en estos últimos años los gobiernos locales y regionales también han usado los fondos de cohesión para aplicar medidas de choque ante la crisis de la covid-19, y el alza de los precios de la energía fruto de la guerra en Ucrania.
El presidente Cordeiro pidió "adaptar" la política de cohesión a la nueva realidad, ya que, aunque dijo que los objetivos de estos fondos siguen siendo "los mismos" que antes, sí que admitió que "el contexto ha cambiado".
"¿Cuando ahora hablamos de migración e integración de refugiados, acaso no hablamos de cohesión social? ¿Cuando hablamos de transición ecológica y digital, acaso no hablamos de cohesión económica y territorial?", se preguntó Cordeiro.
Además, el presidente del Comité de las Regiones pidió a las autoridades subestatales de la UE "no ser rehenes de las discusiones sobre el dinero" cuando se debata sobre asuntos de cohesión.
"La cuestión no es de dónde viene el dinero, sino qué tipo de solución queremos aplicar para estos retos", sostuvo.
Por su parte, la comisaria europea de Cohesión, Elisa Ferreira, intervino en el evento para reivindicar la gestión de estos fondos realizada desde el Ejecutivo comunitario durante su mandato.
"Nuestras ayudas movilizaron ayuda para refugiados y ahora para aquellos más vulnerables en medio de la crisis energética, tanto a empresas como a familias", sostuvo Ferreira en una intervención grabada.
La comisaria aseguró que, pese a tantas crisis, Bruselas no ha "dejado de lado" el objetivo de "reducir las disparidades y mejorar la calidad de vida" de las regiones europeas, donde, según dijo, "se requiere inversión y no hay tantas oportunidades".
"No todas las regiones pueden ser el próximo Silicon Valley, pero todas sí que tienen un potencial endógeno que debe ser explotado", aseveró Ferreira, en alusión a la región californiana que concentra un gran número de compañías tecnológicas.
Según Ferreira, "el problema" de muchas regiones de la UE "es que no tienen capacidad ni condiciones para explotar su potencial".
"Muchas regiones tienen obstáculos para invertir en habilidades, redes de conocimiento, infraestructuras, en asuntos sociales, instituciones, administración pública, etc. Estas inversiones requieren del apoyo de la política de cohesión y de un enfoque hecho a medida (para cada caso)", aseguró.
La nueva Alianza para la Cohesión, la plataforma que organizó este evento en el marco de un pleno del Comité de las Regiones, ha recogido más de 12.000 firmas en 140 regiones de la UE distintas para reclamar a las instituciones comunitarias un blindaje de la política de cohesión.
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