Madrid, 21 feb (.).- La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha expresado su preocupación por la lentitud con la que avanza la electrificación del parque automovilístico español, pues los vehículos electrificados tienen una cuota del 10 % dentro de las matriculaciones, muy por debajo de otros países.
Díaz, que ha clausurado este martes la sesión de mañana del III Foro "La movilidad de tod@s", organizado por la asociación de fabricantes de automóviles Anfac, ha dicho que ese porcentaje de electrificación está muy por debajo de lo que le corresponde a España.
Ha señalado que dicho porcentaje no llega ni a la mitad de la cuota de vehículos electrificados que hay en países como Alemania o Países Bajos, y "tenemos que mejorar".
Según la también vicepresidenta segunda del Gobierno, la transición a la electrificación del automóvil se mueve a dos velocidades en Europa, y España, junto a Italia, se está quedando "un poco atrás", algo que ha dicho que es especialmente negativo, dado el papel que juega España en la fabricación de automóviles.
Para Díaz, las partes implicadas, empresas y administraciones públicas, deben redoblar su esfuerzo para recuperar el tiempo perdido.
Además, ha señalado que hay que desplegar de forma más rápida las infraestructuras que deben dar soporte al despliegue de los vehículos eléctricos e impulsar la instalación de puntos de recarga de acceso público, tarea en la que España va retrasada y muy por debajo de los objetivos asumidos, algo que ha dicho que obliga "a acelerar" en este 2023.
Ha explicado que los compromisos del Gobierno son claros y están en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, y en el Perte del Vehículo Eléctrico y Conectado (VEC), y consisten en la inversión de 24.000 millones de euros en tres años y en la creación de más de 140.000 puestos de trabajo, así como en alcanzar entre 80.000 y 100.000 puntos de recarga en todo el país.
Por otro lado, la ministra ha dicho que es necesario mejorar los salarios en el contexto actual de inflación y de crisis energética, pero no sólo los salarios mínimos, sino también el resto de rentas salariales, y ha puesto como ejemplo los sueldos y estabilidad en el empleo del sector de la automoción.
En este sentido, ha destacado que la estabilidad laboral es del 90 % y la remuneración salarial está por encima de la media de la industria española.
Díaz ha afirmado que es lo que necesita el resto de sectores, al tiempo que ha señalado que hay que lograr una transición climática y digital en la que no existan brechas ni discriminaciones.
Además, la ministra se ha referido a los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE), que en los momentos críticos de la pandemia permitieron la sostenibilidad del empleo en las fábricas de automóviles y ahora también con la crisis de los componentes, "consagrando la validez" de esta fórmula, que ha recordado que ha sido incorporada a la reforma laboral.
En este sentido, Díaz ha asegurado que los ERTE son un "mecanismo de amortiguación social" para salvar a empresas y trabajadores, que no son coyunturales y que "han venido para quedarse".