Dublín, 27 feb (.).- El viceprimer ministro irlandés, Micheál Martin, destacó hoy que el acuerdo alcanzado entre Londres y Bruselas para reformar el Protocolo del Brexit para Irlanda del Norte garantiza que la provincia británica se beneficia de su permanencia en el mercado interior comunitario y en el británico.
"El consenso logrado hoy entre la Unión Europea y el Reino Unido aportará la estabilidad y certeza que necesita Irlanda del Norte para seguir avanzando", declaró el "número dos" del Ejecutivo de Dublín.
A partir de ahora, señaló Martin, los esfuerzos podrán centrarse en restaurar las instituciones de Gobierno norirlandesas, suspendidas desde hace un año por el veto de los partidos probritánicos unionistas al citado protocolo.
"Sé por mis contactos con la gente de Irlanda del Norte que desean que se forme sin retraso un Ejecutivo autónomo", agregó el líder irlandés, si bien el Partido Democrático Unionista, segunda fuerza regional, espera aún a ver el contenido del citado acuerdo para pronunciarse al respecto.
Martin confió en que el anuncio del acuerdo efectuado hoy por la presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen, y el "premier" británico, Rishi Sunak, "abrirá un nuevo capítulo" en las relaciones entre ambas partes.
Por su parte, el líder del DUP, Jeffrey Donaldson, indicó hoy que se tomará "tiempo" para considerar los detalles y para comprobar "si supera nuestras siete pruebas", en referencia a las siete condiciones que el partido considera que cualquier arreglo pos-Brexit debe cumplir para contar con su beneplácito.
En virtud del acuerdo del Brexit que entró en vigor en enero de 2021, la región británica ha quedado integrada en el mercado único europeo en cuanto al comercio de mercancías, lo que exige que Belfast cumpla las normativas comunitarias y que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) sea la última instancia en ciertas disputas comerciales.
El rechazo del DUP a estas condiciones le llevó a abandonar el Gobierno autónomo de Belfast hace más de un año y se niega a formar un Ejecutivo de poder compartido con el nacionalista Sinn Féin -primera fuerza- hasta que vea reformado el citado protocolo.