Madrid, 25 ene (.).- La gestora de inversión Dunas capital considera que en 2023 la renta fija tiene más atractivo para inversiones prudentes que las acciones empresariales, que estarán penalizadas por la alta inflación y el menor crecimiento económico, pese al buen comienzo de año que registran las bolsas de valores.
Según ha explicado el director de gestión de activos de la firma, Alfonso Benito, su escenario macroeconómico implica una reducción de los márgenes y beneficios empresariales por el incremento de costes salariales, debido a las alzas de salarios para compensar la inflación, y energéticos.
Tanto en los precios de la energía como en las tasas de inflación se espera una caída en la primera parte del año por un efecto base (en 2022 subieron mucho con la invasión rusa de Ucrania) que a final de 2023 desaparecerá.
El giro de China va a suponer un impulso para la economía mundial por su tamaño y su capacidad para impulsar la demanda, pero también presionará al alza la inflación y el precio de las materias primas.
Ante esta situación Benito vaticina "ruido y volatilidad" en los próximos meses y "cierta decepción" si los bancos centrales no cumplen las previsiones de un gran número de analistas, que apuestan por bajadas de tipos de interés en la parte final del año, lo que ha impulsado las bolsas en este inicio del año (los europeas acumulan alzas en torno al 8 %).
"El mercado descuenta el escenario perfecto(...). Creemos que es una visión excesivamente optimista", ha añadido el director de renta variable, Carlos Gutiérrez.
Dunas Capital cree que la economía europea aguantará y no caerá en recesión puesto que todavía queda ahorro acumulado durante la pandemia, pero espera unos bancos centrales duros que dejarán los tipos de interés altos durante más tiempo.
La renta fija, que llevaba años con rentabilidades negativas por los bajos tipos de interés y las compras de deuda de los bancos centrales, se ha normalizado y, según la gestora, ofrecerá un rendimiento próximo al de la renta variable con menor riesgo.