Madrid, 30 jun (.).- El coste neto de prestar el servicio universal de telecomunicaciones se situó en 6,89 millones de euros en 2019, un 53 % menos que los 14,6 millones de 2018, al no incluir el servicio de cabinas, según los datos presentados este jueves por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNC)
Telefónica (BME:TEF) fue en 2019 el operador obligado a la prestación de estos servicios, que incluyeron la conexión de red, el servicio telefónico y la conectividad a internet a 1 megabit por segundo (Mb/s) en zonas no rentables, la asistencia a usuarios con discapacidad y las tarifas especiales.
Pese a que en 2019 todavía se prestaba el servicio de cabinas dentro del servicio universal, Telefónica recurrió su designación como prestador del mismo y el Tribunal Supremo anuló su designación, por lo que este coste no se incluye.
Si se compara ambos años manteniendo al margen el servicio de cabinas, el coste de prestar el servicio universal de telecomunicaciones descendió un 30,8 %, al pasar de 9,96 millones en 2018 a 6,89 millones en 2019.
Del importe total de 2019, 4,58 millones correspondieron al coste neto derivado del abono social, un 3,6 % más que en 2018.
Por su parte, el coste por zonas y servicios no rentables ascendió a 2,25 millones, un 60,4 % menos, y el de la prestación del servicio a usuarios con discapacidad se situó en 5.393 euros, un 38,4 % menos.
El servicio universal de telecomunicaciones garantiza que todos los usuarios puedan tener acceso a la red telefónica pública fija desde cualquier ubicación geográfica y a un precio asequible, entre otros elementos.
La CNMC calcula anualmente el coste de prestar el servicio universal, financiado por los operadores con ingresos anuales superiores a 100 millones. Por ello, el organismo determinará en un nuevo expediente las aportaciones que correspondan a cada uno de ellos.
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