Investing.com - El IBEX 35 puso fin a la sesión con un descenso del 0,51%, lastrado por las dudas que se ciernen sobre el sector financiero tras conocerse las intenciones del Deutsche Bank de emprender una ampliación de capital por valor de 8.000 millones de euros.
Pese a ello, el índice de referencia del parqué madrileño ha puesto fin a la jornada en los 10.425,5 puntos, salvando así la barrera psicológica de los 10.400 puntos que perdió durante muchos momentos de la sesión, llegando a rozar incluso la cota de los 10.300 puntos.
El mercado parece que ya se ha cansado de descontar la posible puesta en marcha de medidas no convencionales por parte del BCE y opta por la toma de beneficios, a pesar de que en la tarde de hoy el representante de Luxemburgo dentro de la máxima institución monetaria europea, Yves Mersch, ha vuelto a insistir en esta posibilidad.
Así las cosas, Bankia (MADRID:BKIA) y Banco Sabadell (MADRID:SABE) lideraron los números rojos dentro del selectivo, con unas correcciones del 2,91% y del 2,26%, respectivamente. En la otra cara de la moneda, IAG (MADRID:ICAG) se apuntó la mayor subida del día, con un avance del 3,20%, recuperándose así del castigo al que fue sometida por los inversores durante la pasada semana.
A falta de noticias de calado o de datos macroeconómico que hicieran decantarse a los mercados, las grandes plazas europeas cotizaron mixtas y sin grandes variaciones al cierre respecto a los registros de partida, con la excepción del FTSE Mib, que retrocedió un 1,60%.
De este modo, el Dax se apuntó una ligera subida del 0,31%, seguido por el Cac 40, que avanzó un mínimo 0,30%; mientras que el FTSE 100 y el Euro Stoxx 50 retrocedieron un 0,16% y un 0,09% respectivamente.
En cuanto a la renta fija se refiere, día complicado para la deuda soberana española en el mercado secundario, con la rentabilidad del bono a diez años otra vez por encima del 3%. La prima de riesgo consigue mantener el tipo y aguanta por debajo de los 170 puntos.