30 ago (Reuters) - El principal índice español cerró el lunes a la baja, lastrado por el sector bancario y alejándose de la barrera de los 8.900.
La sesión del lunes se vio marcada por los datos macroeconómicos, que mostraron una caída de la confianza económica en la zona euro en agosto tanto para el bloque como para la economía española.
A escala mundial, las declaraciones de la Reserva Federal de la semana pasada, de talante moderado, apaciguaron los temores respecto a una reducción repentina del estímulo monetario, llevando el S&P 500 y el Nasdaq a máximos históricos.
Mientras tanto, en España, la noticia del nuevo ERE iniciado por Banco Sabadell (MC:SABE) y el desplome de Rovi (MC:ROVI) tras una nueva retirada de dosis de la vacuna contra el COVID-19 de Moderna en Japón, acapararon la atención de los inversores.
En este contexto, el selectivo bursátil español Ibex-35 cerró con una caída de 54,30 puntos el lunes, un 0,61%, hasta 8.867,90 puntos, mientras que el índice de grandes valores europeos FTSE Eurofirst 300 subió un 0,06%.
En el sector bancario, Santander (MC:SAN) perdió un 1,36%, BBVA (MC:BBVA) retrocedió un 0,81%, Caixabank (MC:CABK) cedió un 1,17%, Sabadell cayó un 1,47%, y Bankinter (MC:BKT) se dejó un 1,92%.
Entre los grandes valores no financieros, Telefónica (MC:TEF) retrocedió un 0,44%, Inditex (MC:ITX) cedió un 0,17%, Iberdrola (MC:IBE) no mostró cambios, Cellnex (MC:CLNX) cayó un 2,30% y la petrolera Repsol (MC:REP) perdió un 0,08%.
Fuera del Ibex, el laboratorio madrileño Rovi se dejó un 1,19% tras las noticias de que Japón ha suspendido otro millón de dosis de la vacuna contra COVID-19 después de que se encontraran sustancias extrañas en más lotes y de que se investigue la muerte de dos personas tras recibir inoculaciones de los primeros lotes retirados.
(Información de Flora Gómez; editado por Emma Pinedo)