Washington, 21 feb (EFE).- El índice de precios de consumo (IPC) de Estados Unidos se mantuvo sin cambios en enero cuando las caídas de costos de alimentos y energía compensaron los aumentos en la vivienda, las ropas y los servicios de salud, según informó hoy el Departamento de Trabajo.
Si se excluyen los precios de alimentos y energía, el IPC subió un 0,3 % el mes pasado, el mayor incremento desde mayo de 2011. En enero, los precios de la energía bajaron un 1,7 % y la tercera disminución mensual consecutiva.
En un año, los precios que los consumidores pagan por bienes y servicios han subido un 1,6 %, en tanto que la inflación subyacente del IPC ha sido del 1,9 %.
El Gobierno informó, asimismo, que en enero las remuneraciones horarias promedio, ajustadas por inflación, para todos los trabajadores subieron un 0,2 %, y han aumentado un 0,6 % en 12 meses.
Ayer, el Gobierno informó que el índice de precios de productor (IPP) subió un 0,2 % en enero, después de disminuciones en tres meses consecutivos.
Si se excluyen las categorías de energía y alimentos, que son las más volátiles, la inflación subyacente del IPP el mes pasado fue del 0,2 %, según el informe.
El informe del Gobierno señala que en los últimos 12 meses los precios que pagan los productores han subido un 1,4 %, y la inflación subyacente en su índice ha sido del 1,8 %, el nivel más bajo desde enero de 2011. EFE