El primer ministro canadiense dice que a Europa se le está acabando el tiempo

Toronto (Canadá), 6 jun (EFE).- El primer ministro canadiense, el conservador Stephen Harper, cree que a Europa "se le está acabando el tiempo" y que no se debería esperar a los resultados de las elecciones griegas para establecer un plan de estabilización global.

En una entrevista concedida a la televisión pública canadiense, CBC, y emitida anoche, Harper declaró que en el cuarto año de la crisis financiera europea y mundial, Europa no ha sido capaz de encontrar una solución final al problema.

"Aunque nuestros amigos europeos han hecho un gran trabajo en evitar un evento catastrófico durante los últimos cuatro años, el hecho es que ya estamos en el cuarto año de la crisis y no tenemos una solución definitiva", dijo Harper.

"No quiero sonar demasiado alarmista, pero se nos está acabando el tiempo. Y en términos de estructura de la eurozona y en términos de responder a estos problemas, necesitamos un plan más amplio", añadió.

"No podemos simplemente decir que esperemos a las elecciones griegas. No podemos permitir que las elecciones griegas determinen el futuro de la economía mundial. No es justo para nadie", continuó el primer ministro canadiense.

Las declaraciones de Harper se producen pocas horas antes de que el primer ministro canadiense viaje hoy a París para reunirse el jueves con el presidente francés, Francois Hollande.

Ayer los ministros de Finanzas y gobernadores de los bancos centrales del G7, del que forma parte Canadá, mantuvieron una conversación telefónica para tratar la crisis financiera europea.

Harper también dijo durante la entrevista que "el euro, en su forma actual, cambiará".

"En un momento de crisis, para sostener el euro tienen que hacer un mayor trabajo de integración de lo que han hecho hasta el momento", continuó.

El gobernante canadiense añadió que el país norteamericano tiene planes de contingencia para minimizar las consecuencias de un empeoramiento de la crisis europea en la economía canadiense.

Por su parte, en Washington, el Gobierno de EE.UU. ha insistido también esta semana en que los europeos deben "acelerar" sus acciones para enfrentar la crisis económica.

"Los líderes europeos parecen estar moviéndose con un mayor sentido de urgencia y lo celebramos", comentó Carney en su rueda de prensa del martes.

Pero, añadió, el Gobierno del presidente Barack Obama espera ver "una acción europea acelerada durante las próximas semanas", antes de la cumbre del G20 que tendrá lugar en Los Cabos (México) el 18 y 19 de junio, anotó el portavoz.

"Un movimiento para fortalecer el sistema bancario europeo será de particular importancia", agregó Carney.

A su juicio, "no hay ningún misterio en el hecho de que hay una necesidad de actuar con cierta urgencia" para contener la crisis en la eurozona, que amenaza seriamente a la economía global.

La fragilidad financiera de Europa, con tres países bajo programas de rescate internacional (Irlanda, Grecia, Portugal), Grecia en pleno bloqueo político y a la espera de unas nuevas elecciones legislativas, y varias economías en recesión, preocupa mucho al Gobierno de Obama, que buscará la reelección en noviembre.

A finales de la pasada semana, después de conocerse que el desempleo en EEUU subió en mayo por primera vez en once meses, Obama explicó que parte de la desaceleración se debe a los acontecimientos en el otro lado del Atlántico.

"Tenemos una crisis en la economía europea que está teniendo impacto en todo el mundo y está empezando a proyectar una sombra también sobre nosotros", afirmó el mandatario. EFE