Algeciras (Cádiz), 16 ene (.).- El puerto de Algeciras ha consolidado su actividad en 2024, que cierra con un ligero descenso del 1 %, y repite como uno de los cuatro puertos europeos que superan los cien millones de toneladas de tráfico total.
Así lo ha destacado este jueves en una rueda de prensa para hacer balance del ejercicio el presidente de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras (APBA), Gerardo Landaluce, del que ha destacado que ha sido un año complicado por la situación geopolítica.
En concreto, finalizó el año con 103,6 millones de toneladas, un descenso del 1 % respecto a 2023, con una subida del 7,3 % de los graneles líquidos (28,4 millones de toneladas) y una bajada de los graneles sólidos del 47 %, sobre todo a consecuencia del conflicto laboral en Acerinox (BME:ACX).
Contenedores
El tráfico de contenedores creció en importación (+5 %) y exportación (+3 %), con 637.537 teus (unidad equivalente a 38,5 metros cúbicos); al tiempo que descendieron los tránsitos, de forma que se mantuvieron los niveles del pasado año (-0,6 %), con un total de 4,7 millones de teus, de ellos 453.313 en contenedores llenos.
A lo largo del año hicieron escala en el puerto algecireño 31.503 buques (+4,3 %), de ellos 3.417 (+2,2 %) portacontenedores y de los cuales más de doscientos son los denominados ‘megaships’.
En cuanto a los mercados, presentaron un crecimiento destacado China, Marruecos, Egipto, Brasil y Pakistán, este último por las importaciones de productos textiles.
El “producto estrella”, como lo ha calificado el presidente de la APBA, sigue siendo el aceite de oliva, con un incremento del 8,7 % de las exportaciones.
Igualmente, destacó el incremento, del 16 %, de las exportaciones de accesorios para vehículos, en especial debido a la presencia de plantas de montaje en el norte de Marruecos.
A nivel global, este puerto acapara el 91 % de las exportaciones marítimas que realiza Andalucía y el 67 % de España.
Además, por primera vez, se superó el medio millón de camiones (505.000, un 10,2 % más que en 2023), mientras que la cifra de pasajeros en las líneas marítimas del Estrecho se acercó a su máximo histórico, con casi seis millones de pasajeros y 1,3 millones de vehículos (+11 %).
Resultado positivo
En lo que respecta al resultado económico, la APBA cierra el ejercicio con un resultado bruto de explotación (Ebitda) de 48,5 millones de euros y un resultado neto después de impuestos de 28 millones, con “endeudamiento cero”, ha celebrado Landaluce, que ha valorado el “esfuerzo” en cuanto a bonificaciones, que alcanza los 18 millones.
En cuanto al plan de empresa 2024-28, que ha cifrado en 505 millones de euros, ha destacado las inversiones previstas en infraestructuras portuarias (92 millones), accesibilidad viaria y ferroviaria (90 millones), sostenibilidad y energía (55 millones), innovación y digitalización (14 millones) e integración puerto-ciudad (67 millones).
A lo largo del periodo 2020-2024 se ha incrementado en 35 empleados la plantilla de la APBA y para 2025 se convocarán otras 31 plazas.
Futuro
En cuanto al futuro de la infraestructura, Landaluce se ha referido a cinco ejes estratégicos, que pasan por el nuevo plan estratégico 2030-2040, en el cual ya trabajan junto a la consultora KPMG, entre otras entidades.
Los primeros son la sostenibilidad, tanto a nivel económico como medioambiental y social; y la competitividad, para lo cual ha insistido en la necesidad de mejorar la conexión ferroviaria del puerto y del nuevo fondeadero exterior como principales objetivos.
El resto de los ejes son la digitalización, con el proyecto ‘Smart Port’ como abanderado; y el posicionamiento internacional, destacando la apuesta de Algeciras por la unidad de acción en torno a las reclamaciones sobre la aplicación de la normativa europea sobre emisiones (ETS), para evitar perjuicios.
El presidente de la APBA considera que 2025 se presenta, al igual que el año anterior, con un escenario geopolítico complicado, debido a los conflictos bélicos en Ucrania y Oriente Medio; al tiempo que ha celebrado el anuncio de la tregua entre Israel y Hamás, que espera que permita normalizar el tráfico marítimo en el mar Rojo.
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