Madrid, 9 feb (.).- El director general de Política Energética y Minas, Manuel García, ha dicho que el precio de la energía a largo plazo en España está ya entre los más competitivos de Europa y ha señalado que, cuando empiecen a producir en 2023 las plantas fruto de la última subasta de renovables, éstas van a reducir el precio del mercado en 1,5 (MWh).
Manuel García, que ha participado este martes en la jornada "Lecciones aprendidas de las subastas renovables", de la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA), ha afirmado que la primera subasta bajo el nuevo modelo, que se celebró a finales de enero, ha sido "un éxito organizativo" y ha destacado el interés despertado en el sector.
Ha recordado que 84 agentes concurrieron el día de la subasta por cerca de 10.000 megavatios (MW), más de tres veces la potencia subastada.
El director de Política Energética y Minas ha subrayado estos datos, teniendo en cuenta que esta vez los plazos han sido cortos, y ha dicho que en las que se hagan en el futuro los plazos serán más dilatados y habrá capacidad para preparar más proyectos para concurrir a estas pujas.
Ha indicado que el precio medio al que se adjudicaron los megavatios eólicos y fotovoltaicos están en ambos casos por debajo de los 25 (MWh), lo que supone un descuento "significativo" respecto al precio medio de la electricidad en el mercado mayorista en diciembre y de la cotización de los precios futuros eléctricos para 2023, que es cuando verterán energía las plantas de la subasta.
Manuel García ha dicho que los descuentos son de cerca del 40 %, aunque ha afirmado que no ha habido "precios temerarios" que pongan en duda la viabilidad de los proyectos.
Ha asegurado que el precio de la energía a largo plazo en España "está ya entre los más competitivos de Europa", mientras antes veíamos "con envidia" los precios de otros mercados de Europa, como el escandinavo, el del centro y este de Europa y el francés, y ha añadido que los precios que han salido de la subasta de renovables de enero van a reducir el precio del mercado en 1,5 , cuando empiecen a producir las plantas fruto de esa convocatoria.
Además, ha afirmado que los resultados de la subasta reflejan que la eólica y la fotovoltaica están cerca de competir en igualdad de condiciones.
De cara a futuras subastas, ha señalado que se debe mantener el equilibrio "en esta sana competencia" y hacer compatible la búsqueda de eficiencia con los objetivos mínimos por tecnología, así como logar un adecuado 'mix' de generación que permitan la incorporación de nueva potencia renovable.
En este sentido, ha indicado que, mientras no se desarrolle el almacenamiento y otras fórmulas de flexibilidad en la gestión, hay que asegurar unos perfiles de generación que minimicen tanto el riesgo de vertidos como el financiero.
Por otra parte, ha manifestado que la subasta será muy positiva para la industria proveedora de bienes de equipo y la cadena de valor industrial de las renovables.
Según Manuel García, la industria española es capaz de suministrar un gran porcentaje de equipos y la potencia vinculada a la subasta permitirá dar carga de empleo a 27.000 trabajadores.