ANKARA, 14 oct (Reuters) - El director de Gazprom (MCX:GAZP) dijo que podría ser necesario sustituir grandes tramos de los gasoductos Nord Stream, construidos para suministrar gas a Europa, mientras que Ankara respaldó el viernes las propuestas de Moscú de construir en Turquía un centro de gas como ruta de suministro alternativa.
El presidente ruso, Vladimir Putin, propuso esta semana a Turquía como base para el suministro de gas después de que los gasoductos Nord Stream bajo el mar Báltico resultaran dañados el mes pasado por las explosiones.
La Unión Europea, que hasta ahora recurría a Rusia para cubrir el 40% de sus necesidades de gas, está intentando desprenderse de la energía rusa tras la invasión de Ucrania en febrero.
Los principales importadores de la UE, como Alemania e Italia, han encontrado fuentes alternativas y han acumulado reservas de gas de cara a un invierno que se prevé duro por los elevados precios de la energía y el temor al racionamiento y los cortes de electricidad.
Tanto el Nord Stream 1 como el Nord Stream 2, que conectan Rusia y Alemania, sufrieron daños el mes pasado, expulsando una gran cantidad de gas.
Rusia y Occidente han atribuido los daños a un sabotaje, pero no han identificado al culpable.
"Los expertos dicen que para restablecer el trabajo después de un acto terrorista (sic) de este tipo es necesario cortar realmente un trozo muy grande de tubería, a gran distancia, y construir una nueva sección en este tramo", dijo Alexei Miller, director general de la compañía de gas rusa Gazprom, al Canal Uno de la televisión estatal rusa.
Con el Nord Stream fuera de servicio, Miller dijo que Rusia iniciará la semana que viene conversaciones "concretas" con Turquía sobre propuestas para encaminar más gas en su dirección.
El presidente turco, Tayyip Erdogan, ordenó al Ministerio de Energía que trabaje en la construcción de un centro de distribución tras las conversaciones con Putin sobre el tema, informaron NTV y otros canales de noticias locales.
TEMORES DE SEGURIDAD
Las explosiones del Nord Stream han aumentado la preocupación por la seguridad energética en Europa, mientras el conflicto hace estragos en Ucrania.
La policía noruega investigó el viernes los reportes sobre un dron que sobrevolaba la planta de procesamiento de gas de Kårstø, en el suroeste del país, en una posible violación de los protocolos de seguridad.
La policía también respondió el jueves a una amenaza hecha por teléfono contra la planta de gas de Nyhamna, que junto con Kårstø y un puñado de otras instalaciones noruegas figuran entre las mayores instalaciones de exportación de energía de Europa.
Noruega es ahora el mayor proveedor de gas de Europa tras una fuerte reducción de los flujos procedentes de Rusia.
Los líderes de la UE, que buscan frenar los precios de la energía para consumidores y empresas, podrían respaldar los planes de lanzar un nuevo precio de referencia del gas en una reunión la semana que viene, según un borrador de documento.
Los líderes comunitarios se reunirán los días 20 y 21 de octubre, días después de que la Comisión Europea proponga medidas para hacer frente a la crisis energética.
El índice de referencia para las entregas de gas natural licuado en Europa se ha basado históricamente en el precio del Mecanismo de Transferencia de Títulos neerlandés (TTF, por sus siglas en inglés). Bruselas afirma que es necesario un nuevo índice, ya que el TTF se basa en el suministro por gasoducto y ya no representa un mercado que incluye más GNL.
Aún no está claro si los líderes de la UE aceptarán una "intervención temporal en el mercado", una expresión que podría referirse a un tope de precios del gas que ha resultado ser divisivo.
El primer ministro belga, Alexander De Croo, advirtió que un tope unilateral a los precios de la electricidad, solicitado por la oposición nacional, podría provocar la venta de energía en otros mercados y apagones en Bélgica, el corazón de la UE.
Mientras tanto, los compradores británicos responden al riesgo de cortes de electricidad abasteciéndose de generadores portátiles y linternas, además de ropa de invierno, ropa interior térmica y velas.
(Información de Terje Solsvik y Gwladys Fouche en Oslo, Ece Toksabay en Anakra y James Davey en Londres; escrito por Keith Weir; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)