(Corrige en la EC3405 el titular y el primer párrafo por error de interpretación)
Madrid, 17 may (.).- El presidente de Abanca, Juan Carlos Escotet, ha aplaudido este miércoles la decisión que se tomó en su momento para promover la fusión de las cajas gallegas, a pesar de que grupo resultante acabó siendo intervenido.
El presidente de Abanca, Juan Carlos Escotet, ha aplaudido este miércoles públicamente la decisión de promover en su día una gran fusión de las cajas gallegas, aunque el grupo acabara siendo intervenido.
Durante su participación en el XVIII Encuentro de Banca, organizado por el IESE, el banquero venezolano consideró que la fusión de Caixanova y CaixaGalicia, que dio lugar a Novacaixagalicia Banco, fue un acierto porque creó un grupo con una importante cuota de mercado en Galicia.
Fue precisamente esa cuota de mercado y las posibilidades de negocio, lo que llevó a Banesco a pujar por el grupo gallego tras su nacionalización, ha explicado. Además, ha destacado que, a pesar del cierre del crédito que sufrió la entidad, los clientes, incluyendo empresas, mantuvieron sus cuentas abiertas.
Y ahora Abanca, la marca adoptada tras la compra del grupo por parte de Banesco, aporta cuatro de cada diez euros de financiación en Galicia, cuenta con el 55 % de los clientes de la región y con su actividad contribuye al 11 % del PIB de Galicia y al mantenimiento de 130.000 empleos.
LA VENTA DE PESCANOVA
Por otra parte, Escotet ha defendido la salida de Abanca del capital de Pescanova (BME:PVA) con la venta de su participación en la compañía a la canadiense Cooke, que pasará a controlar el 80 %.
"Francamente no nos ha dolido", ha explicado el banquero, que ha insistido en que, desde la compra de Novacaixagalicia, tenían claro que llevarían a cabo una desinversión ordenada de una cartera de participadas compuesta por unas 370 compañías.
Su idea es que cada uno debe centrarse en lo que sabe -"zapatero a sus zapatos" y, en el caso específico de Pescanova, Abanca permaneció en el accionariado porque "hubo que hacer una suerte de salvamento" porque los fondos entendían que lo mejor era liquidar o fraccionar la empresa.
La razón entonces por la que Abanca decidió tomar el control fue para preservar 12.000 empleos de una empresa "absolutamente estratégica para Galicia", ha recordado el banquero que, a renglón seguido, ha insistido en que siempre dijeron que sería de forma temporal.
Había que buscar un socio industrial porque Pescanova, en palabras de Escotet, es una empresa "difícil de repetir" y con la venta ahora del 80 % a Cooke se preserva la integridad de la empresa, que pasa a formar parte de uno de los conglomerados pesqueros más grandes del mundo.