Fernando Á. Busca
Roma, 12 jun (EFE).- El encuentro entre los ministros de Finanzas
y gobernadores de los bancos centrales del G7 comienza hoy en Lecce,
sur de Italia, con el objetivo de revisar las medidas conjuntas
adoptadas hasta ahora para luchar contra la crisis económica.
La reunión, que comienza con una cena de trabajo, concluirá
mañana con una sesión en la que los representantes de EEUU, Japón,
Alemania, Francia, Reino Unido, Italia y Canadá examinarán las
medidas conjuntas tomadas hasta ahora contra la crisis, con la
participación de Rusia y la UE.
Entre los invitados a la cumbre figuran el comisario de la
Asuntos Económicos y Monetarios de la UE, Joaquín Almunia, y el
director del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique
Strauss-Kahn, así como el presidente del Banco Mundial (BM), Robert
B. Zoellick.
El evento servirá para examinar la conveniencia de volver a la
disciplina fiscal, después de que los gobiernos ricos hayan
invertido miles de millones de dólares en planes de estímulo para
revitalizar la economía.
Las grandes inversiones públicas para sostener la economía han
incrementado la deuda pública de las grandes potencias, que han
entrado en importantes déficit.
Sobre la mesa de esta cumbre, que llega con el precedente de la
del G20 del pasado abril en Londres, estarán los controles a las
entidades financieras y las estrategias más adecuadas a adoptar por
los Gobiernos para ir abandonando las medidas extraordinarias de
control y ayuda tomadas ante la crisis económica.
El ministro de Finanzas italiano, Guido Tremonti, que ocupa la
presidencia de la reunión, aseguró que el encuentro de Lecce es
"sólo" una preparación para la cumbre de líderes que se celebrará
entre el 8 y el 10 de julio en L'Aquila, la capital de la región de
los Abruzos, que quedó devastada el pasado 6 de abril a causa de un
terremoto que mató a casi 300 personas.
Tremonti insistió en la unidad del grupo del G7, vaticinó un
éxito en las negociaciones, y aseguró que la posición sobre cómo
enfrentarse a la crisis que salga de la reunión será "común".
Por su parte, el ministro de Finanzas canadiense, Jim Flaherty,
se mostró dubitativo con la tesis de que el encuentro de Lecce
terminará con un acuerdo sobre la estrategia para abandonar las
medidas extraordinarias contra la crisis.
Floherty dijo no esperar un acuerdo, sino "un inicio de las
discusiones al respecto".
El viceministro de Finanzas alemán, Joerg Asmussen, aseguró que
estamos asistiendo a "los primeros signos de estabilización de la
economía", pero matizó que el tiempo y la velocidad de la
recuperación son "todavía inciertos".
Está previsto que antes de la cena de hoy se reúnan el gobernador
del banco central italiano y presidente del Consejo de Estabilidad
Financiera, Mario Draghi, se reúna con el secretario del Tesoro de
EEUU, Timothy Geithner.
La reunión del G8 de Finanzas también prevé una sesión especial
sobre temas diversos de carácter global, como la seguridad
alimentaria y las consecuencias que ha tenido sobre ella la crisis
económica.
La presidencia del grupo afirma en la presentación de la reunión
de Lecce que es "necesario y urgente" garantizar en modo duradera la
seguridad alimentaria, a través de una aproximación de carácter
permanente.
El grupo NoG8 que coordina iniciativas contra el grupo de los
países ricos ha organizado una contra-cumbre en Lecce para protestar
contra la reunión de los ministros de Finanzas de los países más
industrializados.
A su juicio, la estrategia para luchar contra la crisis debería
centrarse en la sostenibilidad social y ambiental. EFE