Lisboa, 14 abr (.).- Luís Rodrigues, administrador de la estatal TAP hace una década y con experiencia en gestión ejecutiva, asume este viernes sus funciones como nuevo presidente de la aerolínea tras el cese de la cúpula por una indemnización ilegal.
"El nuevo presidente del Consejo de Administración y presidente de la Comisión Ejecutiva de TAP, SA. y de TAP, SGPS., Luís Rodrigues, asumirá funciones este viernes, 14 de abril", avanzaron los Ministerios de Finanzas y de Infraestructuras en un comunicado conjunto el miércoles.
Las carteras explicaron que esta decisión fue aprobada el miércoles en la Asamblea General de accionistas.
"Quedan así reunidas las condiciones para que TAP inicie una nueva etapa, capaz de asegurar el foco en la implementación exitosa del plan de reestructuración de la empresa, para la cual es fundamental la contribución diaria de todos los empleados", cierra el comunicado.
Luís Rodrigues vuelve a TAP tras casi 10 años, ya que entre 2009 y 2014 ejerció como miembro de la Junta Ejecutiva de la aerolínea.
En 2014 entró en la junta ejecutiva de la escuela de negocios lusa NOVA BSE, donde lideró el área de Educación Ejecutiva, y en 2020 fue nombrado CEO y presidente del Grupo SATA -aerolíneas del archipiélago de Azores-.
Asimismo, su currículum incluye etapas en diferentes industrias como las de telecomunicaciones, medios de comunicación y publicidad.
La anterior CEO de TAP, Christine Ourmières-Widener, y el presidente del consejo de administración, Manuel Beja, concluyeron sus funciones este jueves tras un cese que fue anunciado a comienzos de marzo a causa de una indemnización ilegal de medio millón de euros pagada a una exadministradora.
La exadministradora en cuestión era Alexandra Reis, que dejó la aerolínea en febrero de 2022 y fue nombrada secretaria de Estado del Tesoro meses después.
La polémica generada por la indemnización y su nuevo cargo acabó en una crisis para el Gobierno socialista, con su dimisión y la del ministro de Infraestructuras, Pedro Nuno Santos.
La aerolínea está envuelta en otra polémica, ya que este mes se divulgó un correo electrónico de un secretario de Estado pidiendo a TAP cambiar un vuelo para beneficiar al presidente de Portugal en 2022, que todavía está siendo investigado.
TAP es propiedad del Estado portugués, que tiene actualmente en sus manos el 100 % del capital después de aumentar su posición para salvarla tras los daños sufridos por la pandemia, y la aerolínea está bajo un plan de reestructuración.
El Gobierno portugués tiene previsto lanzar en breve el proceso de reprivatización de la compañía, por la que ya han manifestado interés el grupo hispano-británico IAG (BME:ICAG) -matriz de Iberia, British Airways y Vueling-, Air France (EPA:AIRF) y Lufthansa (ETR:LHAG).