Madrid, 28 feb (.).-La Bolsa española cierra febrero con un alza del 2,44 %, el segundo mes consecutivo de subidas, que han permitido al IBEX situarse cerca de los 9.300 puntos y establecer máximos del ejercicio, aunque las ganancias han sido más discretas que en la mayoría de los principales mercados europeos.
El IBEX 35 termina el mes en 9.277,70 puntos, con un avance de 171 puntos, el 2,44 %, que, sumado a las ganancias de enero, arroja un avance del 8,64 % desde el comienzo del año y permite corregir parcialmente el descenso del 15 % de 2018.
Los analistas creen que hay un sustrato positivo porque, en general, las economías siguen creciendo y esto es lo que explica las mejoras en las cotizaciones pero el capítulo de incertidumbres es amplio: profundidad de la desaceleración económica, evolución de los tipos de interés, resultado de la guerra comercial entre EEUU y China, "brexit"....
En la segunda semana del mes Bruselas confirmó que el crecimiento se desacelera, especialmente en Alemania e Italia, lo que llevó al IBEX 35 a perder el 1,8 % y a cerrar muy lejos de los 9.000 puntos, pese a que España sale mejor parada que otros países porque seguirá creciendo por encima de la media de la zona euro.
Avanzado el mes la UE confirmó que la desaceleración es una realidad: el PIB de la eurozona aumentó un 1,8 % en 2018, la tasa más baja desde el final de la recesión en 2014 y seis décimas por debajo de la del año anterior.
El freno fue especialmente notorio en el segundo semestre, y más en el caso de Alemania, que de momento sortea la recesión por los pelos.
La tercera semana de febrero la bolsa cerró su mejor ciclo desde principio de noviembre, con un avance del 3 %, aunque fue de las más rezagadas de las grandes de Europa, lastrada por las incertidumbres en torno a la convocatoria de elecciones generales, de las que -según los analistas- es previsible que no salgan mayorías claras.
Los mercados tuvieron buenas noticias por esos días con lo avances en las negociaciones entre Estados Unidos y China para evitar la guerra comercial, un asunto mayor porque una tregua en este sentido eliminaría una de las principales amenazas para el crecimiento mundial.
Por esta razón, y porque los resultados empresariales son, en general, positivos, la onda compradora se extendió también en los días finales del mes, que el IBEX remató con máximo anual en 9.277,70 puntos.
La evolución del "brexit", con la posibilidad de que se amplíe el plazo para la salida de Reino Unido de la UE -que la libra parece estar celebrando con subidas hasta niveles de hace casi dos años- y las señales que envían tanto la Fed como el BCE sobre la evolución futura de la política monetaria son otros de los centros de atención entre los analistas.
El petróleo sigue la racha alcista y en el mes acumula un aumento de más de 4 dólares, que suben a más de 12 desde comienzo del año; y el euro se cruza a 1,137 dólares, algo por debajo de los 1,145 de cierre del mes anterior.
La deuda española a diez años cotiza al 1,175 %, lejos por tanto del 1,5 % de principio de año y, dado que la deuda alemana ha bajado, pero menos, el diferencial medido por la prima de riesgo se ha reducido en más de 20 puntos, hasta cerrar febrero por debajo de los 100.
Todos los grandes valores terminan el mes con ganancias, salvo Repsol (MC:REP), que cede un 1,34 %. Inditex (MC:ITX) aumenta un 8,99 % desde fin de enero; BBVA (MC:BBVA), un 5,88 %; Santander (MC:SAN), un 3,97 %; Iberdrola (MC:IBE), el 2,11 %, y Telefónica, el 1,25 %.