Salvatore Ferragamo, la prestigiosa marca italiana de lujo, ha presentado una perspectiva cautelosa para su beneficio operativo de 2024, anticipando que se situará en línea con las estimaciones más conservadoras de los analistas. Esta proyección se produce tras experimentar una caída del 7,2% en los ingresos a tipos de cambio constantes durante el tercer trimestre, principalmente debido a la contracción de la demanda en Asia.
En una conferencia con analistas, el Director Ejecutivo de la compañía, Marco Gobbetti, subrayó que el deterioro de la confianza del consumidor fue especialmente notable en la región Asia-Pacífico, un mercado clave para Ferragamo que representa aproximadamente el 31% de sus ingresos totales. En esta zona, las ventas netas sufrieron un descenso significativo del 20,5%.
Gobbetti explicó que el complejo entorno de mercado está ejerciendo una presión adicional sobre los resultados financieros de la empresa, lo que podría retrasar la consecución de sus objetivos económicos. Concretó que las expectativas más bajas para el beneficio operativo del año se sitúan en torno a los 30 millones de euros (32,7 millones de dólares).
La facturación de Ferragamo en el tercer trimestre alcanzó los 221 millones de euros, una cifra inferior a los 229 millones de euros previstos por el consenso de los analistas. Este retroceso en las ventas refleja una tendencia generalizada en el sector del lujo, donde incluso el líder del mercado, LVMH, ha reportado una caída del 3% en sus ventas del tercer trimestre.
El comunicado de Ferragamo establece un tono prudente respecto al desempeño financiero de la empresa frente a los persistentes desafíos en el mercado global de artículos de lujo, especialmente en la región Asia-Pacífico.
Reuters contribuyó a este artículo.
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