Madrid, 26 abr (.).- El presidente de Iberdrola (BME:IBE), Ignacio Sánchez Galán, no ve razón para extender "más allá del verano" las medidas que se pusieron en marcha para detraer los beneficios extraordinarios obtenidos por las eléctricas con el alza del precio del gas, pues ha habido una "normalización".
Sánchez Galán, durante la conferencia con analistas en la que ha presentado este miércoles los resultados de la compañía en el primer trimestre, ha indicado que, de hecho, la denominada "excepción ibérica", por la que se topa en España y Portugal el precio del gas para generación eléctrica, no se está activando desde hace un tiempo.
Ha recordado que se necesitan "enormes" inversiones para que Europa pueda alcanzar la autosuficiencia energética, si no se quiere volver a vivir situaciones como las del año pasado, en que la crisis generada por la invasión rusa de Ucrania disparó los precios de la electricidad, afectada por la subida del gas.
Sánchez Galán ha afirmado que hay que hacer más inversiones y que para eso las compañías necesitan "marcos predecibles".
En este sentido, ha recordado que en el caso de España ha habido doce cambios en la legislación sobre la electricidad, cuando el problema que había tenía que ver con el precio del gas.
"MÁS ZANAHORIAS Y MENOS PALOS" EN EUROPA
Sánchez Galán ha manifestado que en Europa "nos hacen falta más zanahorias y menos palos", dar incentivos y "no penalizar a la gente", porque de lo contrario las inversiones para transformar el sistema energético en Europa "no van a fluir en la medida que se necesita".
En cuanto a la propuesta de reforma del mercado eléctrico que ha hecho la CE, ha indicado que ésta constata que el mercado ha funcionado bien en Europa, donde no ha habido apagones, lo que significa que las inversiones "han llegado a tiempo" y "los europeos han disfrutado de un sistema eléctrico muy bueno".
Respecto a la evolución de las reservas hidroeléctricas de la compañía en el actual contexto de sequía, ha dicho que "tenemos una situación bastante razonable en las reservas totales de nuestras presas", a diferencia del año pasado en que por esta causa, junto a la parada que sufrió la central nuclear de Cofrentes, Iberdrola tuvo que comprar energía a terceros y a un precio muy alto.
Según ha explicado el consejero delegado, Armando Martínez, las reservas hidroeléctricas están ahora normalizadas por las precipitaciones que hubo en diciembre y enero en el noroeste del país, en cuencas como las del Duero, el Tajo o el Miño, donde están alrededor del 60 %; aunque, por el contrario, en la cuenca del Ebro han disminuido.
Por otro lado, Sánchez Galán, al ser preguntado si Iberdrola revisará su plan de alianzas y rotación de activos, después de completar el 100 % de su objetivo para 2025 de 7.500 millones de euros, ha respondido que, aunque el objetivo se ha alcanzado, "no nos vamos a quedar dormidos" y, si surge una oportunidad, están preparados para analizarla, pero no hoy ningún plan nuevo.
Respecto a las previsiones de beneficio del grupo para este 2023, en el que Iberdrola prevé que crezca en un dígito medio-alto (sin extraordinarios adicionales), después de que en el primer trimestre lo haya hecho en un 40 %, Sánchez Galán ha señalado que las cifras de este primer trimestre no se van a repetir, aunque el desempeño será bueno.
La compañía ha atribuido ese crecimiento del 40 % a la recuperación de los déficits comerciales acumulados en el Reino Unido y a la recuperación de la producción en España y en la UE con respecto al primer trimestre de 2022, que le obligó comprar más electricidad y a precios muy altos.