Lisboa, 20 abr (.).- El gobernador del Banco de Portugal (BdP), Mário Centeno, afirmó este jueves que la reducción temporal del IVA en un paquete de alimentos básicos tiene un "coste elevado" para el Estado, puede no tener efecto en los precios finales y "no está enfocado en los más vulnerables".
"Es una medida que tiene el gran riesgo de que puede no ser sentida por los consumidores finales. Tiene un coste presupuestario relativamente elevado y también es una medida que desde el punto de vista presupuestario no está enfocada en los más vulnerables", aseguró Centeno hoy en un acto en una escuela secundaria en Vila Real (norte de Portugal).
A su juicio, también será "muy difícil" medir su impacto, ya que los precios varían cada día y ya se ha producido una reducción de precios a nivel internacional previa.
Este fue el mensaje que transmitió el gobernador ante la medida impulsada por el Gobierno de António Costa, que entró en vigor este martes y que afectará a 46 alimentos básicos, incluyendo algunos pescados, carne, pollo, leche, huevos, pan, arroz, aceite y algunas frutas.
La reducción durará inicialmente hasta octubre y puede impactar hasta en un 0,2% en la inflación anual, según cálculos del Ejecutivo, que confía en terminar 2023 con un 5,1%.
La Autoridad de Seguridad Alimentaria y Económica (ASAE) lusa ha registrado un descenso del 6,26 % en el precio medio de una cesta de alimentos con 44 productos desde este martes, según anunció hoy el Ministerio de Economía y Mar luso en un comunicado.
La rebaja del IVA llega tras un acuerdo alcanzado entre el Gobierno, productores y distribuidores, y tendrá un impacto de unos 600 millones de euros en las arcas públicas.
En la práctica, según la organización de consumidores Deco Proteste, la medida supone un ahorro para los portugueses de unos 8 euros en la compra de los productos incluidos en la lista.
En marzo, Portugal registró una inflación interanual del 7,4 % con un aumento superior al 19 % en alimentos.