Tokio, 13 may (EFE).- El fabricante japonés de vehículos Honda Motor (T:7267) logró en 2015 un beneficio neto de 344.500 millones de yenes (2.792 millones de euros), un 32 por ciento menos interanual debido a tipos de cambio desfavorables y al coste de las llamadas a revisión por los airbags defectuosos de Takata (T:7312).
En el año fiscal nipón 2015, que terminó el pasado marzo, Honda registró un beneficio operativo de 503.300 millones de yenes (4.079 millones de euros), un 24 por ciento menos, anunció en un comunicado la empresa automovilística.
Su resultado bruto de explotación (EBIDTA) retrocedió un 21,2 por ciento respecto a 2014 hasta los 635.000 millones de yenes (5.147 millones de euros), mientras que su facturación por ventas ascendió un 9,6 por ciento hasta los 14,6 billones de yenes (118.350 millones de euros).
El tercer fabricante nipón de automóviles logró incrementar sus ventas de vehículos en un 10,6 por ciento hasta los 4,74 millones de unidades en todo el mundo, gracias sobre todo a su buena marcha en los mercados de Norteamérica y de Asia, sin incluir a Japón.
Sus ventas de motocicletas, en cambio, retrocedieron un 3,1 por ciento hasta las 17,05 millones unidades.
Sin embargo, sus resultados empeoraron al acusar la apreciación del yen frente a divisas extranjeras y al asumir los costes de las llamadas a revisión de millones de sus vehículos en todo el mundo por el problema de los airbags fabricados por la también empresa nipona Takata.
Estas medidas han supuesto para Honda un gasto de 436.000 millones de yenes (3.535 millones de euros) durante el pasado ejercicio, según detalló la empresa.
El defecto de fabricación puede provocar que el inflador de estos dispositivos se abra con demasiada fuerza y proyecte fragmentos de metal a los ocupantes, lo que se ha relacionado con la muerte de al menos diez personas.
Honda ha sido el fabricante más afectado por el fallo en los infladores de estos dispositivos, ya que 24,5 millones de airbags instalados en vehículos de la empresa vendidos en todo el mundo fueron llamados a revisión.
Para el ejercicio en curso, que terminará a finales de marzo de 2017, Honda prevé embolsarse un beneficio neto de 390.000 millones de yenes (3.161 millones de euros), un 13,2 por ciento más.
Su beneficio operativo ascendería a 600.000 millones de yenes (4.863 millones de euros), un 19,2 por ciento más, mientras que sus ingresos por venta crecerían un 5,8 por ciento hasta los 13,7 billones de yenes (111.827 millones de euros).