Tokio, 29 ene (EFE).- El fabricante de vehículos japonés Honda Motor (T:7267) obtuvo entre abril y diciembre de 2015, los primeros nueve meses del año fiscal nipón, un beneficio neto de 437.900 millones de yenes (3.332 millones de euros), un 2,4 % más que en el mismo período de 2014.
El tercer fabricante nipón del sector atribuyó el incremento a las fuertes ventas de vehículos registradas en Estados Unidos y en Asia -a pesar de la caída de la demanda local- y la debilidad del yen, según explicó en un comunicado emitido hoy.
La empresa con sede en Tokio logró un beneficio antes de intereses e impuestos (ebit) en este período de 694.100 millones de yenes (5.279 millones de euros), un 0,63 % interanual menos, así como un beneficio operativo de 567.200 millones de yenes (4.314 millones de euros), lo que supone un descenso interanual del 3 %.
Los ingresos por venta de Honda crecieron entre abril y diciembre un 11,25 % en comparación con el mismo período del año precedente, hasta 10,94 billones de yenes (83.209 millones de euros).
En cuanto al tercer trimestre del año fiscal nipón, que va de octubre a diciembre, la compañía japonesa obtuvo un beneficio neto de 124.100 millones de yenes (942 millones de euros), un 18,5 % menos que en el mismo período de 2014.
Honda atribuyó el retroceso en este período al aumento de los gastos que tuvo que afrontar, incluido el desembolso para mejorar la calidad de sus productos, y los efectos desfavorables de las divisas extranjeras.
A pesar de esta bajada generalizada, los ingresos por venta de Honda crecieron entre octubre y diciembre un 3,4 % hasta 3,6 billones de yenes (27.463 millones de euros), un avance que el fabricante nipón atribuyó principalmente a los ingresos obtenidos a través de sus negocios de automóviles y de servicios financieros.
La compañía japonesa está tratando de ahorrar costes para compensar los enormes gastos derivados de las averías en los airbags de la también japonesa Takata (T:7312) (el inflador puede abrirse con demasiada fuerza y proyectar fragmentos de metal a los ocupantes), que se ha relacionado con la muerte de al menos diez personas.
Honda ha sido el fabricante más afectado por el fallo en los infladores de estos dispositivos, ya que 24,5 millones de airbags instalados en vehículos de la empresa vendidos en todo el mundo fueron llamados a revisión.
En cuanto al ejercicio actual, que concluye el 31 de marzo, la compañía tokiota prevé lograr un beneficio neto de 525.000 millones de yenes (3.982 millones de euros), un 3,1 % más con respecto a lo embolsado el pasado curso.
Espera también un beneficio antes de intereses e impuestos (ebit) de 805.000 millones de yenes (6.107 millones de euros), un 0,2 % interanual menos, así como una ganancia operativa de 685.000 millones de yenes (5.200 millones de euros), un 2,1 % interanual más.
Honda espera además que sus ingresos por venta se sitúen en 14,55 billones de yenes (110.473 millones de euros), 500.000 millones de yenes menos de los inicialmente recogidos en sus previsiones de resultados publicadas el pasado 4 de noviembre, un 9,2 % más en relación a la facturación del año fiscal de 2014.