Madrid, 16 ene (EFE).- Iberia ha aceptado reducir por debajo del 14,5 % el recorte de capacidad de la aerolínea, lo que hace mover a la baja el resto de los ajustes contemplados en el plan de reestructuración de la compañía, y desbloquear así la negociación con la representación de los trabajadores, según fuentes sindicales.
Los sindicatos consideran que la situación en Iberia se ha desbloqueado, tras la reunión que han mantenido esta mañana CCOO, UGT, USO, Asetma, Sitcpla y CTA-Vuelo con la empresa, que, a su juicio, ha venido al encuentro con un talante bastante distinto al que ha venido mostrando hasta ahora.
Iberia ha aceptado negociar el plan 2013-2017, es decir con un horizonte de cinco años en lugar de tres planteados inicialmente, sobre las bases de los acuerdos alcanzados entre ambas partes el pasado 17 de diciembre ante el servicio de mediación Sima.
Asimismo, la compañía se ha mostrado dispuesta a hablar sobre la propuesta que le hicieron llegar el pasado viernes los sindicatos (Plataforma sindical 11 de enero) y que partía precisamente de los citados acuerdos.
Por su parte, un portavoz de la compañía señaló a EFE que las negociaciones "siguen en marcha, son duras, las posiciones están alejadas y el tiempo se acaba" -se debe llegar a un acuerdo definitivo en el entorno del 31 de enero-.
El secretario de Organización del Sector Aéreo y Servicios Turísticos de CCOO, Jorge Carrillo, indicó hoy a EFE que Iberia se ha mostrado dispuesta a aplicar el ERE en vigor (72/01), que prioriza las prejubilaciones, para afrontar el recorte de plantilla necesario, y prorrogarlo durante el período de vigencia del plan de reestructuración.
El ERE iría acompañado de los ajustes salariales y de productividad necesarios para hacer posible su aplicación con la obtención de beneficios.
Carrillo añadió que Iberia ha aceptado hablar también sobre la disminución de los márgenes de beneficios necesarios para empezar a incrementar la capacidad a partir de 2014 que se elevaban al 7,1 % en 2014 y al 7,6 % en 2016 en la propuesta de la compañía.
Se reformará el plan comercial y se fijará el crecimiento de la capacidad, medida en asientos por kilómetros operados (AKO), de cada año, de tal manera que en 2017, éste ha de ser, al menos de dos dígitos, de acuerdo con los sindicatos.
Asimismo, se negociará el papel de Vueling e Iberia Express y en el caso de esta última, la empresa está dispuesta llegar a un acuerdo, si no sobre su integración en la matriz, al menos, para que su peso no condicione al tamaño de la plantilla de Iberia Operadora, agregó Carrillo.
Todas las medidas de ajustes -actividad, flota, salarios o plantilla- se concretarán en las mesas técnicas sectoriales de cada colectivo -Hándling (servicios en tierra), Mantenimiento, Comercial-Corporativo y Tripulantes de cabina (TCP)- que se han puesto en marcha de inmediato.
Con la aceptación por parte de Iberia de negociar en términos aprobados en el Sima, desaparece el riesgo de que los sindicatos convoques movilizaciones, dijo a EFE el portavoz del sector aéreo de UGT, Manuel Atienza, quien destacó que la negociación es global y finalizará con un solo acuerdo, por lo que no habrá acuerdos diarios de cada una de las mesas negociadoras. EFE