Berlín, 22 dic (.).- Un total de 13.000 inversores institucionales y privados Wirecard (ETR:WDIG) han presentado una demanda contra la empresa de contabilidad Ernst & Young (EY), debido al papel que le atribuyen en el escándalo de la quiebra de la empresa alemana de pagos electrónicos.
La asociación de protección de inversores DSW, que representa a los accionistas perjudicados, informó hoy de la presentación de la queja ante la Audiencia Provincial de Múnich, en un comunicado en el que anunció que reclama compensaciones por valor de 700 millones de euros.
De acuerdo con la nota, se podría tratar de una de las mayores demandas de indemnización que se han producido contra una de las empresas de auditoría conocidas como las "Big Four" o cuatro grandes en inglés.
Según declaraciones de los abogados de DSW citadas en los medios, EY hubiera debido asegurarse por medios propios de la exactitud de las cuentas de Wirecard en lugar de fiarse de la empresa y darle el visto bueno a los balances manipulados.
En abril de este año, el ente supervisor alemán APAS ya impuso a EY una prohibición de asumir encargos de empresas que cotizan en bolsa durante dos años e impuso multas a la consultoría y a varios de sus empleados.
El APAS, que depende de la Oficina Federal para Controles Económicos y Exportaciones (BAFA), lo hizo tras llegar a la conclusión de que la firma de consultoría no había cumplido sus deberes profesionales.
Wirecard colapsó en junio de 2020 cuando se supo que tenía un agujero financiero de 1.900 millones de euros pese a que durante años EY había dado el visto bueno a sus balances.
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