León, 16 ene (.).- El juicio por la muerte de seis mineros en el accidente ocurrido el 29 de octubre de 2013 en el pozo Emilio del Valle, en Llombera de Gordón (León), se reanudará el próximo 6 de febrero una vez se ha comprobado si los ingenieros y técnicos acusados en el proceso disponen de seguros privados que cubra su responsabilidad civil.
El juicio fue suspendido hace casi dos años, el 5 de abril de 2021, por el Juzgado de lo Penal número 2 de León, que contó con el apoyo de la Fiscalía para tomar esta medida, después de que varios abogados tanto de las acusaciones como de las defensas así lo reclamaran hasta dilucidar si los ingenieros y técnicos acusados contaban con pólizas de seguros individuales que cubrieran su responsabilidad civil.
Varios letrados mantuvieron que tenían constancia de que los ingenieros superiores y técnicos acusados disponían de estos seguros, y subrayaron que si se confirma daría un vuelco al pago de las indemnizaciones reclamadas a las que pueden tener que hacer frente.
Se acordó pedir a los colegios oficiales superiores que identifiquen estas posibles pólizas de seguros de los encausados y dar a estas compañías la posibilidad personarse en la causa para su defensa ya que en caso contrario podría conllevar la nulidad del juicio.
Por su parte, los principales responsables de la empresa que explotaba el pozo en el que ocurrió el siniestro, la Hullera Vasco Leonesa (HVL), encabezados por su presidente, Antonio del Valle, aseguraron ante la jueza antes de la suspensión de la vista oral que carecen de seguros individuales.
En este juicio se sientan en el banquillo de los acusados 16 directivos, ingenieros y vigilantes de la Hullera Vasco Leonesa, para cada uno de los cuales la Fiscalía pide una pena de tres años y medio de cárcel por un delito de homicidio imprudente.
Además la Fiscalía acusa a la propia sociedad como responsable civil subsidiaria y a la compañía aseguradora HDI como responsable civil directa y solidaria y les reclama indemnizaciones que superan los dos millones de euros.
Por su parte, las acusaciones particulares elevan la petición de pena a seis años y medio, el máximo previsto en casos de homicidio imprudente, mientras que las defensas solicitan la libre absolución de los acusados.
El accidente se produjo por el colapso brusco y posterior hundimiento de una bóveda cargada de carbón en una zona con gas metano que provocó una desgasificación de grisú y causó la muerte por asfixia de los seis de los trabajadores que se encontraban en esa zona del pozo Emilio del Valle.
Esa fue la principal conclusión del informe elaborado por el grupo de investigación constituido por la Comisión Regional de la Minería de Castilla y León para esclarecer las causas del accidente.
Las víctimas del accidente fueron Carlos Pérez, Manuel Moure, Antonio Blanco, Orlando González, José Luis Arias y Roberto Álvarez, de entre 35 y 45 años.