Berlín, 10 mar (.).- Los principales bancos alemanes registraron este viernes fuertes caídas en sus cotizaciones en la Bolsa de Fráncfort como consecuencia de las que el jueves impactaron en la Bolsa de Nueva York tras el cierre y la liquidación del Silvergate Bank y el desplome del Silicon Valley Bank.
El selectivo DAX de la Bolsa alemana caía un 1,07 % hacia las 14:30 GMT y las pérdidas estaban encabezadas por el Deutsche Bank (ETR:DBKGn), con un 7,24 % de caída hasta los 10,68 euros por acción.
Otro banco alemán, el Commerzbank (ETR:CBKG), bajaba a esa hora un 2,56 % (hasta los 11,41 euros), en una jornada en la que el sector bancario acusó las noticias procedentes de Estados Unidos.
Este viernes las acciones del Silicon Valley Bank (SVB) se desplomaron otro 60 % en las actividades electrónicas previas a la apertura de la Bolsa de Wall Street, una caída que se suma a la experimentada ayer y que está lastrando al sector de la banca dentro y fuera de Estados Unidos.
El banco, enfocado principalmente en empresas emergentes, especialmente del sector tecnológico y científico, se vio obligado a realizar una venta forzosa de títulos el miércoles por valor de 21.000 millones de dólares, lo que supuso unas pérdidas de 1.800 millones y se tradujo en una caída del 60 % de sus acciones en Wall Street.
En Estados Unidos, varias instituciones financieras se han visto arrastradas por el movimiento de SVB, como Signature Bank, que ayer cayó un 12 % y hoy se dejaba cerca del 10 % en las actividades electrónicas previas a la apertura del parqué, y First Republic Bank, cuyas acciones se depreciaron ayer un 17 % y esta mañana caían un 15 %.
En una valoración de la situación el diario "Frankfurter Allgemeine" estimó este viernes que "los problemas de los bancos estadounidenses recuerdan a un problema que afecta principalmente a las cajas de ahorro y los bancos cooperativos en Alemania, que se enfrentan a grandes amortizaciones de sus tenencias de valores debido al aumento de los tipos de interés".
E indica que el riesgo que ahora se está materializando en Estados Unidos no ha llegado en Alemania y que consiste en que "estas pérdidas no se queden en el papel, sino que realmente ocurran si los bancos se ven presionados a vender activos".