Madrid, 13 ene (.).- Los bancos solo ofrecen contratar una cuenta de pago básica por iniciativa propia al 15 % de los clientes, aunque si estos pertenecen al colectivo más vulnerable -según sus ingresos- el porcentaje sube hasta el 80 %, según las conclusiones de un estudio publicado este viernes por la asociación Asufin.
Esto se debe al "desconocimiento" que aún existe tanto por parte de los trabajadores de las entidades como de los usuarios acerca de este producto, que fue regulado en 2017 siguiendo las directrices de Bruselas para luchar contra la exclusión financiera.
Se trata de una cuenta bancaria que proporciona al usuario los servicios financieros más básicos, como domiciliaciones, transferencias o tarjetas de débito, con un coste limitado, de un máximo de 3 euros mensuales, aunque es totalmente gratuita para personas en situación de vulnerabilidad.
Según Asufin, en un momento de subida de precios y también de costes financieros, las entidades financieras deberían esforzarse en hacer llegar "más y mejor" a sus clientes un producto que, pese a tener limitaciones como la obligación que sea la única cuenta bancaria del usuario, permite "escapar de la exclusión financiera".
Pese a todo, contratar una cuenta comercial, es decir la que cobra comisiones, es la primera opción que se da al cliente, en el 57 % de los casos, pero asciende al 66 % en el caso de los jóvenes, lo que Asufin considera positivo, pues es un colectivo que no suele tener una cuenta bancaria y podría suponer un acceso cómodo y gratuito al sistema.
Asimismo, el porcentaje se sitúa en el 63 % en el caso del colectivo inmigrante y en el 53 % en el de los trabajadores del hogar, añade el estudio.