Tokio, 7 ene (EFE).- La Bolsa de Tokio cerró casi plana en una sesión muy volátil que se movió entre la caza de gangas y los temores por el desplome continuado del precio del petróleo, apuntaron analistas locales.
El selectivo Nikkei cerró con una subida de 2,14 puntos, un 0,01 por ciento, y se situó en las 16.885,33 unidades, mientras que el segundo indicador, el Topix, que agrupa a los valores de la primera sección, perdió 1,34 puntos, un 0,09 por ciento, hasta las 1.359,80 enteros.
Las principales ganancias las registraron los sectores textil y el de las autopartes mientras que el de la banca y la minería lideraron las pérdidas.
El parqué tokiota abrió un día más en negativo siguiendo la tendencia de los mercados de EEUU y Europa en la víspera que volvieron a verse arrastrados por la continuada caída del precio del petróleo, que batió récords no alcanzados desde la primavera de 2009.
Sin embargo, de manera intermitente el Nikkei se situó en terreno positivo después de que los inversores se lanzaran a la caza de gangas tras cuatro sesiones continúas de caídas en los que se dejó casi 1.000 puntos.
La prudencia a la hora de asumir riegos mientras continúan los temores entorno al precio del crudo y el futuro político de Grecia de cara a las elecciones del 25 de enero no dejó que el indicador acabara de despegar y finalizó la sesión prácticamente plano.
El líder mundial del motor, Toyota, avanzó un 1,5 puntos después de anunciar que ha vendido más de un millón de nuevos coches en China en 2014 por primera vez.
Por su parte, el gigante de la eléctrica Sony avanzó un 4,6 por ciento por los buenos resultados de la venta de consolas respecto a sus competidores en 2014.
En la primera sección retrocedieron 1.003 valores frente a 690 que avanzaron y 166 que cerraron en tablas.
El volumen de negocio ascendió a 2,143 billones de yenes (15.160 millones de euros), frente a los 2,525 billones de yenes (17.769 millones de euros) del martes.