Madrid, 11 mar (.).- La Bolsa española cumplirá mañana, 12 de marzo, un año del mayor desplome de toda su historia, una jornada en la que perdió un 14,06 %, en un momento de expansión descontrolada del coronavirus en todo el mundo, del inicio de la paralización de la actividad y el miedo a la brusca caída económica.
En esa sesión de descalabro bursátil a nivel mundial, España, donde se contabilizaban unos 3.000 contagios de coronavirus diarios, comenzaba poco a poco a cerrar su actividad para frenar la pandemia, y días después, el 14 de marzo, decretó el estado de alarma, hecho que anticipó el confinamiento domiciliario de la población y la paralización de toda la economía.
Mientras, el Banco Central Europeo (BCE) y el resto de bancos centrales como la Reserva Federal de EEUU, o el Banco de Inglaterra, y la mayoría de gobiernos empezaron a aprobar medidas para paliar los efectos económicos.
Días antes, el 24 de marzo, los mercados de todo el mundo ya acusaron, por primera vez, la expansión del coronavirus, una pandemia que saltaba fuera de China, y llegaba a Europa.
En esa sesión, la Bolsa española se dejó algo más del 4 %, su mayor caída hasta entonces desde el referéndum sobre el Brexit, en junio de 2016.
Unas pérdidas que superaría ese 12 de marzo, ante el pánico desatado por la covid-19, y que dejó al selectivo español en los 6.390,90 puntos.
Días más tarde, el 16 de marzo, y con otro descalabro en la sesión de casi el 8 %, el IBEX 35 se situó en los 6.107,2 puntos, niveles en los que no cotizaba desde julio de 2012.
Atrás quedaban los máximos alcanzados un mes antes, el 17 de febrero, cuando superó los 10.000 puntos.
Incluso, el día 19, se situó en los 10.083 puntos, su cota más alta desde 2018.
Pese a las pérdidas registradas en marzo de 2020, la renta variable española ha conseguido sobreponerse gracias a que la economía mundial ha retomado de forma paulatina la actividad, a las medidas de estímulo fiscal y monetario aprobadas por los diferentes bancos centrales, y sobre todo, al desarrollo de las vacunas.
Los positivos estudios que se conocían en noviembre sobre las vacunas de Pfizer (NYSE:PFE) y BioNTech dieron alas a la Bolsa española que, el día 9 de ese mes, se anotó su mayor subida en diez años y medio, el 8,57 %, en una jornada en la que también animó a los inversores la victoria del demócrata Joe Biden en las elecciones presidenciales estadounidenses.
Ese mes de noviembre, el IBEX 35 alcanzó el mejor registro mensual de su historia, con una subida del 25,18 %, por encima, de nuevo de los niveles previos al estallido de la epidemia (8.000 puntos).
Actualmente, el IBEX 35 cotiza en el entorno de los 8.600 puntos (máximos desde principios de marzo de 2020).
Dentro del IBEX 35, todos los grandes valores del selectivo también han logrado recuperar los niveles previos al descalabro bursátil del 12 de marzo de 2020.
No obstante, dentro del indicador español destaca PharmaMar (MC:PHMR) como la compañía que mejor se ha recuperado en este año, ya que ha pasado de cotizar a 38,44 euros por acción (11 de marzo de 2020), hasta los 105 euros actuales.
Algunos otros valores todavía se mantiene por debajo del precio de cotización de esa fecha, como en el caso de IAG (MC:ICAG), que en el día de hoy alcanza los 2,4 euros por título, frente a los 3 euros de hace un año o los 4 euros de principios de febrero de 2020.