Madrid, 12 nov (.).- Los agricultores y ganaderos afectados por la dana no tendrán dificultad en cobrar las ayudas de la Política Agraria Común (PAC) de 2024 ni en cumplir sus controles, porque se hicieron antes del temporal, y en 2025 podrán alegar casos de "fuerza mayor" para obtener excepciones a los requisitos.
La normativa de la PAC establece requisitos ambientales y agronómicos para el abono de las subvenciones pero, ante los daños del temporal, fuentes del Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA) han subrayado que los agricultores de las zonas damnificadas pueden estar tranquilos sobre su cobro este año.
Los pagos de la campaña 2024 empezaron el 16 de octubre y los controles necesarios para su abono se han realizado; sólo queda algún trámite documental, pero no se van a ver afectadas las ayudas directas, según las fuentes del FEGA, organismo pagador dependiente del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA).
En las comunidades afectadas por la dana -Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha y Andalucía- ya se han abonado pagos de la PAC del ejercicio 2024 por valor de 1.100 millones de euros en forma de anticipos (2.200 en toda España), según la misma fuente.
Respecto a 2025, la normativa española y comunitaria de la PAC permite aplicar el concepto de "fuerza mayor" y además en mayo se publicó un documento de la Comisión Europea (CE) que explica ese concepto, que define a circunstancias "anormales, imprevisibles" y cuyas consecuencias no ha podido evitar el productor.
Entre ellas se encuentran las catástrofes naturales o fenómenos meteorológicos que afectan gravemente a las explotaciones, según la reglamentación.
Además, si se trata de una zona concreta como ha ocurrido en España y no en todo el país, el Estado miembro podrá definir toda la zona como "seriamente afectada" como ha hecho el Consejo de Ministros con la declaración de zona catastrófica.
La causa de fuerza mayor se aplica normalmente caso por caso, pero en zonas como las damnificadas en Valencia, el concepto se podrá aplicar de oficio por las autoridades competentes, que en este caso serían las comunidades autónomas, según el FEGA.
Esto significa que en la campaña que viene un agricultor podrá invocar la "fuerza mayor" si incumple un requisito con motivo de la dana, cuestión que verificarán las administraciones.
Aparte de las ayudas directas, y dentro del "pilar" de desarrollo rural de la PAC -medidas cofinanciadas por el país complementarias o distintas a la agricultura-, los representantes de los Gobiernos de los Veintisiete han dado el visto bueno este martes en Bruselas a otra actuación para paliar los daños de las catástrofes naturales.
En concreto, los países afectados por recientes catástrofes sin precedentes pueden obtener asistencia adicional con cargo al Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader) para ayudar a agricultores, silvicultores y empresas afectadas.
En particular, se permitirá a los países reprogramar los fondos del Feader no comprometidos del período 2014-2020 (marco presupuestario anual anterior al actual).