JPMorgan advierte de que el S&P 500 puede estar en riesgo debido a la disminución del número de inversores que apuestan a la baja en los principales fondos cotizados (ETF), como SPY y QQQ.
Los analistas de la institución observan que esta reducción "ha contribuido sistemáticamente a la fortaleza de las acciones estadounidenses durante el año anterior, desempeñando un papel en la reducción de las fluctuaciones del mercado".
Dicho más claramente, hay menos inversores que anticipen una caída del mercado tomando posiciones cortas. La preocupación de JPMorgan es que este patrón pueda haberse acentuado en exceso, estableciendo una "apuesta directa contra la volatilidad del mercado" que podría tener consecuencias adversas.
"Teniendo en cuenta el bajo nivel actual de su interés en corto", indica el informe, "esta apuesta directa contra la volatilidad del mercado parece exagerada si se compara con datos anteriores".
La preocupación es que si se producen acontecimientos desfavorables en el mercado, podría producirse una inversión de esta pauta. Los inversores que antes apostaban por descensos del mercado se apresurarían entonces a recomprar acciones, lo que podría provocar una caída significativa del valor de las mismas.
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