Madrid, 30 nov (.).- El mercado de inversión inmobiliaria en residencias de estudiantes supera los 400 millones de euros en lo que va de año, una cifra un 21 % superior al volumen registrado en todo 2020, según los datos de la consultora Savills Aguirre Newman.
En un comunicado, la consultora ha explicado este martes que la creciente movilidad de los estudiantes extranjeros, sumado a los nuevos estándares de alojamiento demandados, está impulsando el desarrollo de nuevos proyectos en este segmento.
El mercado de residencias de estudiantes, que en 2020 retrocedió un 27 % como consecuencia de las restricciones de movilidad provocadas por la pandemia, cuenta con un perfil inversor en el que denominan los actores internacionales, aunque cada vez se desarrollan más "joint ventures" (empresas conjuntas) que suman capital internacional y conocimiento local.
Además, el mercado se encuentra principalmente en manos de accionistas privados, y se caracteriza por un alto nivel de obsolescencia.
Sin embargo, la consultora señala que la llegada de grandes grupos internacionales impulsará la mejora de la calidad de los activas y su tamaño medio, permitiendo desarrollar un mercado que se adapte a los estándares internacionales.
En este sentido, y aunque el mercado ha registrado un crecimiento acumulado del 10 % durante los últimos cinco años en cuanto al número de plazas, la provisión de camas se sitúa solamente en el 7,1 %, con un ratio de cama de una por cada catorce estudiantes.
De cara al futuro, durante este año entrarán al mercado 20 proyectos con 5.100 nuevas plazas que permitirán superar las 100.00 camas en el mercado nacional.
En 2022 y 2023 se prevé la incorporación de 14.600 nuevas plazas distribuidas en 36 proyectos, mejorando la provisión de camas hasta el 8,3 % con un ratio de cama de una por cada doce estudiantes.
De los nuevos proyectos previstos para 2022 y 2023, Barcelona, Madrid y Sevilla concentrarán el 53 % es las promociones y el 63 % de las plazas.
Respecto a los precios, las tarifas en Madrid, Barcelona y Valencia se sitúan por encima de los 1.200 euros, frente a los hasta 850 euros que se pagan en ciudades como Sevilla, Málaga, Granada, Salamanca, Pamplona, Bilbao, San Sebastián, Santander (MC:SAN) y Zaragoza.
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