Madrid, 9 jun (.).- La transición del sector aéreo hacia los combustibles sostenibles de aviación (SAF) tendrá un impacto en el precio del billete, ha augurado este jueves el consejero delegado del gupo IAG (BME:ICAG), Luis Gallego, durante su intervención en el III Foro Internacional Expansión.
Aunque el grupo, integrado por compañías como British Airways (BA), Iberia o Vueling, está trabajando para que no tenga que ser así, el uso de biocumbustible supone un sobrecoste entre 500 y 3.000 dólares, es decir tres o cuatro veces el precio del queroseno, lo que se tendrá que traducir en el del billete, ha agregado.
El grupo está trabajando para ser más eficientes, pero todos estos costes, incluso los derivados de las tasas medioambientales, a su juicio, van a tener un impacto en los precios.
Por otro lado, actualmente, no hay suficiente oferta de biocumbustible y para poder cumplir con el compromiso de que el 10 % lo sea del total utilizado en 2030, IAG está ya haciendo compras.
En Estados Unidos, hay políticas que incentivan su producción, mientras que, en Europa, en Reino Unido, por ejemplo, harían falta unas 14 plantas para producir la cantidad que va a ser necesaria.
El grupo está intentando comprar el SAF disponible, pero, para llegar al 100 % de lo que necesita, "todavía es totalmente insuficiente", por lo que Gallego considera que hace falta que los gobiernos inviertan en nuevas plantas.
Otro de los factores que ayudaría a la aviación a ser más eficiente es el cielo único europeo, pero Gallego teme que la situación de Ucrania no vaya a ayudar a conseguirlo porque ahora cada país "va a poner un mayor énfasis en la protección de su espacio aéreo".
RECUPERACIÓN DE LA PANDEMIA
En cuanto a la pandemia, ha comentado que la aviación no se priva de ninguna crisis y cada cinco o diez años está dentro de alguna, pero también siempre las recuperaciones que se proyectan después de ellas se quedan cortas porque la demanda suele volver con más fuerza y es lo que está sucediendo ahora.
IAG recuperará en el tercer trimestre (verano), alrededor del 85 % de su capacidad precovid y, en algunos mercados como el Atlántico norte, alcanzará prácticamente el 100 %.
En Iberia, se están recuperando todas las rutas de Latinoamérica y, a finales del año, las capacidades serán cercanas al 90 % de las de 2019.
En Asia, aparte de que China sigue cerrada, también la guerra de Ucrania está suponiendo que los vuelos, sobre todo a países más del norte del continente que tienen que sobrevolar el espacio ruso, está afectando a muchas compañías, aunque no es el caso de IAG que tiene sólo un 8 % de la oferta en esa región.
Por segmentos de mercado, el viajero por ocio se recupera más rápidamente que el que lo hace por trabajo, ha indicado, para añadir que las grandes compañías están tardando más en volver que las pymes, para las que es más importante tener reuniones cara a cara.
También, dentro del segmento corporativo, el de la banca "está volviendo a volar antes y ya estamos en niveles de 2019".
Gallego ha asegurado que IAG no tiene problemas de falta de personal porque, en España, el ERTE "ha estado muy bien diseñado y nos ha permitido mantener las plantillas, con lo cual seguimos teniendo las que teníamos anteriormente".
En el caso de BA, "desgraciadamente" en Reino Unido el esquema no era tan completo como el español, por lo hubo que reducir la plantilla, aunque la de pilotos no se vio prácticamente afectada.
AIR EUROPA
Respecto de la compra de Air Europa, "lo que estamos haciendo es intentar adquirir el 20 % que hemos articulado como un préstamo que convertiremos en capital cunado tengamos las aprobaciones de Competencia necesarias, pero el paso siguiente es intentar tener el 100 %", ha asegurado.
"Si llegamos a un acuerdo para la compra de la compañía y también las condiciones de competencia son asumibles, pues iremos para adelante, y, si no, pues, desgraciadamente, no podremos hacerlo", ha concluido.