Investing.com - Las bolsas europeas han rebotado tras encadenar dos días de auténticos desplomes, motivados por el panorama de dudosa gobernabilidad que han dejado las elecciones en Italia.
Milán, que ayer se vino abajo un 4,89%, hoy se anota al cierre un 1,77%. El Ibex 35 no sólo ha recuperado los 8.000 puntos perdidos ayer, sino que ha conquistado los 8.100. Sube un 1,95% y se sitúa en 8.136. Así, reduce su descenso en lo que va de año al 0,38%.
El Cac francés repunta un 1,92%, el FTSE londinense un 0,88% y el Dax alemán un 1,04%. La calma va así regresando, de momento, a la renta variable europea, gracias también al empujón de Wall Street.
Mientras el centroizquierda italiano explora sus posibilidades de formar Gobierno, la desconfianza continúa instalada en los mercados de deuda, con las primas de riesgo en niveles altos, aunque menos que en los dos últimos días. La española se repliega hasta el entorno de los 380 puntos básicos. Y la rentabilidad del bono a 10 años se relaja ligeramente, hasta el 5,23%.
La prima de riesgo italiana, por su parte, baja también levemente hasta los 335 puntos básicos, con lo que el diferencial con la española se reduce a menos de 40 puntos. Esta relajación en Italia se produce a pesar de que el resultado de la subasta del Tesoro de hoy no ha sido nada brillante: Se han adjudicado los 6.500 millones de euros previstos como máximo en bonos a 5 y 10 años, pero los tipos de interés han aumentado hasta máximos de octubre pasado. En el caso de los títulos a 10 años, se elevan al 4,83% desde el 4,17% de enero. En los bonos a 5 años, se han incrementado hasta el 3,59% desde el 2,94%. La demanda ha superado en 1,61 veces la oferta.
Moody’s ha advertido de que podría rebajar el rating de Italia. Los comicios, subraya la agencia de calificación, en vez de aclarar el rumbo político de la tercera economía europea, han aumentado el riesgo de que se detengan o bloqueen las reformas puestas en marcha por el Primer Ministro saliente Mario Monti, y la incertidumbre puede contagiarse a países vecinos con economías débiles como España y Portugal.
En España, se ha terminado en suspense en torno al déficit público de 2012. Éste descendió hasta el 6,7% del PIB, sin incluir las ayudas a la banca, según ha revelado el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en el Congreso de los Diputados. Es cuatro décimas superior al 6,3% pactado con Bruselas, pero se cumple la previsión del ministro de Economía Luis de Guindos, que situaba la cifra por debajo del 7%.
Entre tantos datos inquietantes, uno alentador: la confianza económica de la zona euro subió en febrero por cuarto mes consecutivo. Se sitúa en 91,1 puntos, desde los 89,5 de enero, lo que representa el mejor dato desde mayo de 2012.
Los inversores están muy atentos al discurso que pronunciará esta noche, ya tras el cierre de los mercados, el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, sobre "La línea y la función del BCE en la crisis en la zona del euro" en la Katholische Akademie en Múnich.
Después de defender ayer en el Senado estadounidense la expansiva política monetaria de la Reserva Federal, hoy Ben Bernanke comparece ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes para ofrecer el primero de sus dos testimonios anuales. Lo hace en un contexto de creciente preocupación, ya que pasado mañana, 1 de marzo, entrarán en vigor drásticos recortes del gasto público en caso de que el Congreso y la Casa Blanca no lleguen a un acuerdo de largo alcance para evitarlo.
Mientras, a ese lado del Atlántico, se han conocido datos como los pedidos de bienes duraderos a las fábricas de Estados Unidos, que disminuyeron un 5,2 % en enero debido, principalmente, a la reducción de los encargos de aviones comerciales y militares.
Volviendo la vista hacia el parqué madrileño, vemos que únicamente cuatro valores han cerrado en rojo. El farolillo rojo es Amadeus, que cede un 1,56%. Indra lidera los avances, con un 4,96%. Le sigue Endesa, que sube un 4,79% tras anunciar sus resultados: Logró un beneficio neto de 2.034 millones en 2012, lo que supone un descenso del 8% respecto al ejercicio anterior, y atribuye esta caída a los recortes en la remuneración de actividades reguladas aplicados por el Gobierno para acabar con el déficit de tarifa.
También OHL ha presentado unas cuentas que han sido celebradas por el mercado con una subida del 3,86%. Obtuvo un beneficio neto de 1.005,5 millones de euros en 2012, el 350,3 % más que en el ejercicio anterior, gracias a las plusvalías por 1.051,3 millones obtenidas por la venta de sus autopistas en Brasil y Chile y de su filial de medio ambiente Inima.
Otro valor que sube con fuerza, un 4,11%, es Repsol, después de llegar a un acuerdo para vender al grupo petrolero Shell sus activos de gas natural licuado (GNL) en Trinidad y Tobago, Perú y Bahía de Bizkaia Electricidad (BBE) en una operación valorada en 6.653 millones de dólares.
Milán, que ayer se vino abajo un 4,89%, hoy se anota al cierre un 1,77%. El Ibex 35 no sólo ha recuperado los 8.000 puntos perdidos ayer, sino que ha conquistado los 8.100. Sube un 1,95% y se sitúa en 8.136. Así, reduce su descenso en lo que va de año al 0,38%.
El Cac francés repunta un 1,92%, el FTSE londinense un 0,88% y el Dax alemán un 1,04%. La calma va así regresando, de momento, a la renta variable europea, gracias también al empujón de Wall Street.
Mientras el centroizquierda italiano explora sus posibilidades de formar Gobierno, la desconfianza continúa instalada en los mercados de deuda, con las primas de riesgo en niveles altos, aunque menos que en los dos últimos días. La española se repliega hasta el entorno de los 380 puntos básicos. Y la rentabilidad del bono a 10 años se relaja ligeramente, hasta el 5,23%.
La prima de riesgo italiana, por su parte, baja también levemente hasta los 335 puntos básicos, con lo que el diferencial con la española se reduce a menos de 40 puntos. Esta relajación en Italia se produce a pesar de que el resultado de la subasta del Tesoro de hoy no ha sido nada brillante: Se han adjudicado los 6.500 millones de euros previstos como máximo en bonos a 5 y 10 años, pero los tipos de interés han aumentado hasta máximos de octubre pasado. En el caso de los títulos a 10 años, se elevan al 4,83% desde el 4,17% de enero. En los bonos a 5 años, se han incrementado hasta el 3,59% desde el 2,94%. La demanda ha superado en 1,61 veces la oferta.
Moody’s ha advertido de que podría rebajar el rating de Italia. Los comicios, subraya la agencia de calificación, en vez de aclarar el rumbo político de la tercera economía europea, han aumentado el riesgo de que se detengan o bloqueen las reformas puestas en marcha por el Primer Ministro saliente Mario Monti, y la incertidumbre puede contagiarse a países vecinos con economías débiles como España y Portugal.
En España, se ha terminado en suspense en torno al déficit público de 2012. Éste descendió hasta el 6,7% del PIB, sin incluir las ayudas a la banca, según ha revelado el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en el Congreso de los Diputados. Es cuatro décimas superior al 6,3% pactado con Bruselas, pero se cumple la previsión del ministro de Economía Luis de Guindos, que situaba la cifra por debajo del 7%.
Entre tantos datos inquietantes, uno alentador: la confianza económica de la zona euro subió en febrero por cuarto mes consecutivo. Se sitúa en 91,1 puntos, desde los 89,5 de enero, lo que representa el mejor dato desde mayo de 2012.
Los inversores están muy atentos al discurso que pronunciará esta noche, ya tras el cierre de los mercados, el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, sobre "La línea y la función del BCE en la crisis en la zona del euro" en la Katholische Akademie en Múnich.
Después de defender ayer en el Senado estadounidense la expansiva política monetaria de la Reserva Federal, hoy Ben Bernanke comparece ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes para ofrecer el primero de sus dos testimonios anuales. Lo hace en un contexto de creciente preocupación, ya que pasado mañana, 1 de marzo, entrarán en vigor drásticos recortes del gasto público en caso de que el Congreso y la Casa Blanca no lleguen a un acuerdo de largo alcance para evitarlo.
Mientras, a ese lado del Atlántico, se han conocido datos como los pedidos de bienes duraderos a las fábricas de Estados Unidos, que disminuyeron un 5,2 % en enero debido, principalmente, a la reducción de los encargos de aviones comerciales y militares.
Volviendo la vista hacia el parqué madrileño, vemos que únicamente cuatro valores han cerrado en rojo. El farolillo rojo es Amadeus, que cede un 1,56%. Indra lidera los avances, con un 4,96%. Le sigue Endesa, que sube un 4,79% tras anunciar sus resultados: Logró un beneficio neto de 2.034 millones en 2012, lo que supone un descenso del 8% respecto al ejercicio anterior, y atribuye esta caída a los recortes en la remuneración de actividades reguladas aplicados por el Gobierno para acabar con el déficit de tarifa.
También OHL ha presentado unas cuentas que han sido celebradas por el mercado con una subida del 3,86%. Obtuvo un beneficio neto de 1.005,5 millones de euros en 2012, el 350,3 % más que en el ejercicio anterior, gracias a las plusvalías por 1.051,3 millones obtenidas por la venta de sus autopistas en Brasil y Chile y de su filial de medio ambiente Inima.
Otro valor que sube con fuerza, un 4,11%, es Repsol, después de llegar a un acuerdo para vender al grupo petrolero Shell sus activos de gas natural licuado (GNL) en Trinidad y Tobago, Perú y Bahía de Bizkaia Electricidad (BBE) en una operación valorada en 6.653 millones de dólares.