Sofía, 18 abr (.).- Los agricultores de Bulgaria exigen que la Unión Europea (UE) tome medidas contra la importación de trigo y girasol desde Ucrania, y amenazan con organizar protestas en Bruselas si se desoyen sus reivindicaciones.
El presidente de la Cámara Agraria de Bulgaria, Kostadin Kostadinov, subrayó este martes de que si no se vetan las importaciones de productos ucranianos, como lo han hecho ya Polonia, Hungría y Eslovaquia, se requieren urgentemente otros instrumentos que protejan el mercado local.
Los agricultores búlgaros se quejan de la "competencia desleal" que ven en los granos procedentes de Ucrania, libres de aranceles y considerablemente más baratos que los ofrecidos por ellos.
Para garantizar que no dejen de funcionar los corredores creados para facilitar la exportación de cereales ucranianos hacia terceros países, Kostadinov propuso "tarifas de tránsito", una medida que estima más eficaz que las ayudas ofrecidas por la CE.
"Queremos medidas como tarifas de tránsito (...) que es mucho más importante que los fondos que se ofrecen", dijo Kostadinov a la emisora pública BNT.
Bruselas ha ofrecido a Bulgaria 16 millones de euros para compensar los daños sufridos, pero los agricultores del país más pobre de la UE afirman que las pérdidas directas están en torno a 400 millones de euros.
El ministro búlgaro de Agricultura, Yavor Gechev, consideró ayer que sería solo una "cuestión de tiempo" que su gobierno adopte un veto comparable al anunciado el pasado fin de semana por Polonia y Hungría.
No obstante, indicó que antes de seguir los mismos pasos se estudiaría la "base jurídica" de esas prohibiciones, que Bruselas calificó ya de "inaceptables" por ser "unilaterales".
Gechev explicó que la situación para los agricultores búlgaros, que ya habían protestado en marzo contra la creciente presencia de productos ucranianos en el mercado nacional, puede agravarse aún más tras el veto de otras capitales de la región.
Cuando "países miembros reaccionan de esta manera, si nosotros no reaccionamos así, las acumulaciones (de cereales y alimentos) en el territorio búlgaro pueden volverse aún mayores", dijo el ministro.
Según la Asociación Nacional de Productores de Cereales, la producción nacional sin vender que se ha acumulado en los depósitos tiene ya un valor de unos 2.000 millones de euros.
Desde que la UE levantara los aranceles a los productos del país agredido por Rusia, más de 640.000 toneladas de cereales ucranianos han entrado en Bulgaria, causando una caída del 30 % en los precios del trigo y de más del 50 % en los de las semillas de girasoles.
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