Valencia, 5 abr (.).- Los despidos del ERE acordado en Ford (NYSE:F) España, finalmente de 1.124 empleados, se efectuarán entre el 2 de mayo y el 31 de diciembre de este año y abrirán una etapa de tres años, en la que será necesaria la adopción de medidas de transición al vehículo eléctrico para mantener la estabilidad en la factoría valenciana.
Casi un mes de negociaciones entre la dirección de Ford España y los sindicatos han dado como resultado este martes un acuerdo de planes de salida con carácter voluntario para los empleados afectados, veinte menos de los planteados al inicio de la negociación, y de mejora de las cantidades para las bajas incentivadas.
Ha sido la voluntariedad el elemento clave de la negociación del Expediente de Regulación de Empleo (ERE), en una plantilla que ha sufrido otros dos expedientes en los últimos años (uno de 350 empleados en 2020 y otro de 630 en 2021) y que, precisamente por eso, la complicación se centraba en las bolsas de edad de los trabajadores.
El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha valorado el acuerdo del ERE como una muestra del diálogo social que impera en la planta, aunque siempre "duele" aplicar procesos de este tipo, pero ha resaltado las condiciones acordadas para que sea menos traumático.
Puig ha manifestado, en declaraciones a EFE, que el acuerdo supone "unir esfuerzos para consolidar un logro que ya se consiguió precisamente gracias a esa colaboración entre los trabajadores y la dirección de la planta valenciana", en referencia al Acuerdo por la Electrificación entre la dirección europea y el sindicato UGT.
Lo importante es que Ford "tiene un gran futuro por delante" y la Generalitat, ha asegurado Puig, "siempre estará al lado" de la planta valenciana de Almussafes para que siga siendo referente no solo dentro del grupo, que "ya lo es", sino también como una de las plantas modélicas en fabricación y diálogo social dentro del sector del automóvil.
UN ERE CON EL 100 % DE VOLUNTARIOS
El presidente del Comité de empresa, Carlos Faubel, de UGT, sindicato mayoritario en la planta de Almussafes y que ha firmado en solitario el acuerdo del ERE, ha mostrado su satisfacción por la consecución de la principal reivindicación, la voluntariedad del 100 % de las salidas ya que, con los planes pactados en función de la edad, habrá suficientes empleados que se adherirán al ERE de forma voluntaria, asegura a EFE.
"Esto nace en el Acuerdo por la Electrificación -entre Ford Europa y UGT-, que garantiza la viabilidad de la fábrica en unos momentos muy delicados de reestructuración y que coinciden con el cambio de paradigma del automóvil", recuerda Faubel.
Ford ya anunció que todas las plantas europeas tendrían que acometer excedentes de personal y, una vez garantizada la viabilidad de la planta de Almussafes -que fue elegida frente a la alemana de Saarlouis para fabricar los nuevos eléctricos-, "hemos podido exigir unas condiciones para que los despidos se convirtieran en salidas voluntarias", ha manifestado.
Los despidos se producirán entre el 2 de mayo y el 31 de diciembre, con la fecha tope del 30 de septiembre para adherirse al ERE: en la planta de vehículos serán 940-960 afectados y en motores 140-160, mientras que en las oficinas centrales de Madrid solo afectará a 16 empleados.
De los 5.800 trabajadores actuales en la factoría se pasará a unos 4.600, dedicados a la producción de los modelos Kuga y Transit después del cese de fabricación el pasado 1 de abril de S-Max y Galaxy, lo que ha motivado la aplicación del ERE.
MEDIDAS DE TRANSICIÓN: MECANISMO RED Y PLANES DE FORMACIÓN
Según el presidente del Comité de empresa, parece que la concreción de los nuevos eléctricos y las inversiones para Almussafes se va a alargar y no se espera un anuncio al respecto en los próximos meses.
"Cómo pasamos este valle y cómo transiciona la plantilla para engancharse al eléctrico" es lo que se le viene encima a la planta, tres años hasta 2026, cuando se prevé que salga el primer eléctrico de Valencia.
A su juicio, habrá que hablar de planes de formación para fabricar los nuevos vehículos y quizá sea el momento de afrontar la situación con el Mecanismo RED (de Flexibilidad y Estabilización del Empleo), dirigido a que las empresas puedan hacer frente a situaciones de crisis generales o sectoriales, un instrumento jurídico que permite a las empresas hacer reducciones de jornada y suspensiones temporales de contratos de trabajo ante dificultades económicas.
No obstante, advierte de que es pronto para adelantar acontecimientos y será "cuando tengamos la foto de dónde estamos y qué volumen de empleo se puede requerir" el momento de afrontar la situación con las alternativas posibles.
De la misma manera, la industria de componentes de la automoción está a la espera de conocer cómo afecta la menor carga de trabajo en Ford y en "actitud preventiva" hasta saber cuáles son los volúmenes de trabajo previstos, que redundarán de una manera u otra en las propias plantillas de las empresas auxiliares, según fuentes del Clúster de la Automoción (AVIA).