Madrid, 8 mar (.).- El número de municipios de más de 500 habitantes que carece de algún tipo de acceso presencial a servicios bancarios se redujo un 32,9 % durante el año pasado, lo que repercutió en beneficio de una población cercana a las 70.000 personas.
Esos son los datos reunidos por el catedrático de análisis económico de la Universidad de Valencia Joaquín Maudos, al que se le encargó que hiciera un seguimiento de los avances de la banca para combatir la exclusión financiera, y a los que ha tenido acceso EFE.
Mientras que 2022 comenzó con 243 municipios de más de 500 habitantes (con una población total de 211.550 habitantes) sin oficina bancaria, cajero o alguna otra vía para acceder a efectivo, un año después esa cantidad se ha reducido en 79 municipios (con 69.558 habitantes), para quedar en 164 municipios (141.992 habitantes) que siguen en esas circunstancias.
En un informe presentado el pasado verano por el citado catedrático, se ponía de manifiesto que a cierre de 2021 unas 657.500 personas -el 1,4 % de la población- que vivían en un total de 3.230 municipios españoles no tenía acceso presencial a servicios financieros.
Se identificaron 243 municipios de más de 500 habitantes sin servicios bancarios presenciales, en donde residían 211.550 habitantes, el 0,45 % del total nacional, y las tres patronales bancarias -AEB, CECA y Unacc- se comprometieron públicamente y con el Gobierno a mejorar esa situación.
Las patronales diseñaron una hoja de ruta para “rescatar” a esa población financieramente excluida, con puntos de acceso a los servicios bancarios en forma de oficinas, cajeros automáticos, agentes financieros o acuerdos con oficinas de Correos.
Para ver el grado de cumplimiento de esos planes, AEB, CECA y Unacc decidieron encargar de nuevo al profesor Maudos informes trimestrales de seguimiento de la inclusión financiera y EFE ha tenido acceso al primero de ellos, que pone el foco en los municipios de más de 500 habitantes.
Según la información facilitada por las patronales para la elaboración de ese estudio, en uno de los municipios sin servicios bancarios se abrió una oficina y en otros 26 las entidades bancarias pusieron cajeros.
En el resto se facilitó el acceso a través de oficinas de Correos, "ofibuses" o cajeros de empresas no bancarias.
En términos absolutos es en Castilla y León donde más se redujo la población sin acceso presencial a servicios bancarios (15.205 habitantes menos), seguida de la Comunitat Valenciana (13.256) y Cataluña (12.145).
Por provincias, destacan las caídas en Cantabria (8.056), Guadalajara (7.367), Valencia (7.336) y Palencia (5.483).